La leche ha sido un alimento básico en la dieta de muchas culturas durante siglos. Se considera una fuente importante de nutrientes como el calcio y la vitamina D, especialmente, dentro de la dieta básica de los niños durante su etapa de desarrollo y crecimiento. Sin embargo, a lo largo de los años, ha habido un debate en curso sobre las ventajas y desventajas de consumir leche.
Estudios de la Universidad de Navarra explican que las características de la leche dependen en buena medida de su forma de obtención, es decir, del tipo de animal a ordeñar, su manejo y tratamiento en el hogar o los lugares donde se desarrollan, ya que esto intervendrá de manera considerable en la calidad final.
Se encontró que el consumo de este alimento lácteo ha disminuido con los años y recientemente ha empezado a ser sustituido por leches de origen vegetal, por cuenta de sus altos niveles de grasa, la intolerancia a la lactosa o que su origen sea animal.
Ventajas de consumir leche
Fuente de calcio: Algunos nutricionistas consideran que es una de las mejores fuentes de calcio, esencial para la salud de los huesos y los dientes. Según estudios publicados en revistas como “Journal of the American Dietetic Association”, una taza de leche proporciona aproximadamente el 30% de la ingesta diaria recomendada de calcio.
Nutrientes esenciales: Además del calcio, la leche contiene proteínas, vitamina D, vitamina A y otros nutrientes esenciales, importantes para el crecimiento, el desarrollo y la salud en general.
Fortalecimiento de huesos: la leche es conocida por su papel en la prevención de enfermedades óseas como la osteoporosis. Estudios como los publicados en “Journal of Bone and Mineral Research” han demostrado que el consumo regular de productos lácteos puede aumentar la densidad ósea.
Desventajas de consumir leche
Intolerancia a la lactosa: cientos de personas en todo el mundo son intolerantes a la lactosa, lo que significa que tienen dificultades para digerir esta bacteria en la leche. Situación que puede ocasionarles problemas digestivos como hinchazón, gases y diarrea.
Alergias a la leche: algunas personas son alérgicas a las proteínas de la leche, lo que puede provocar reacciones graves. Estas alergias son más comunes en los niños y, a menudo, se superan con la edad.
Contenido calórico: la leche entera y otros productos lácteos pueden ser altos en calorías y grasas saturadas. Esto puede contribuir al aumento de peso si se consume en exceso.
Por lo tanto, la decisión de consumir leche depende de factores individuales, como la tolerancia a la lactosa, las preferencias dietéticas y el consumo puede llevarse a cabo sin problemas ni molestias, la leche puede ser una valiosa fuente de nutrientes esenciales. Pero, si existe una fuerte intolerancia a la lactosa o hay desarrollo de alergias, es importante buscar alternativas adecuadas y consultar a un profesional de la salud para asegurarte de obtener los nutrientes necesarios.