Cada época crea sus demonios y sus ángeles. Así ha quedado demostrado con la importancia que ha adquirido en la discusión pública el tema del acoso. En las redes sociales el asunto es tratado con frecuencia y allí se disecciona qué es acoso y cuáles comportamientos se consideran peligrosos en las relaciones de amistad y de amor. En las últimas semanas, la serie Bebé Reno ha sido el pretexto para que muchos internautas traigan a colación el tema y prendan las alarmas sobre lo que ocurre a su alrededor. Sin embargo, más allá de la historia del comediante que es asediado por una mujer hasta el punto de ponerle la vida patas arriba, lo cierto es que los expertos han detectado algunos síntomas que revelan que la relación que se sostiene con alguien no es saludable para ninguno de los dos.
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En caso de dudas sobre la naturaleza de una relación que se sostiene con alguien o de una vivencia que se tiene, conviene recordar que los expertos han identificado unos tipos de acoso. Estos son, a saber: el acoso físico, relacionado con los golpes y el daño de pertenencias personales; el acoso verbal, signado por los apodos denigrantes y las intimidaciones verbales; el acoso psicológico, que se centra en la manipulación y el chantaje emocional.
Todos estos tipos de acoso suelen confundirse con excesos del sentimiento, en el caso de las parejas. Y casi todos tienen la intención de controlar la vida y las emociones del otro. Los expertos recomiendan mantener los ojos abiertos ante estas circunstancias y no dejar pasar de largo algún hecho de acoso, por más pequeño que sea.
