La depresión y la ansiedad pueden tener bases biológicas y hereditarias, si bien hay mecanismos para prevenir los trastornos mentales, o prepararse para ellos.
Esta es una de las metas principales del Departamento de Salud Mental y Abuso de Sustancias de la Organización Mundial de la Salud, al ser estos trastornos de los más frecuentes y costosos: se estima que cada año se pierden 12.000 millones de días laborales por la depresión y la ansiedad, lo que cuesta a la economía mundial casi un billón de dólares, según la Organización Internacional del Trabajo y la OMS.
Algunos factores de riesgo para contraer las enfermedades mentales catalogados desde la Organización Panamericana de la Salud (OPS) pueden prevenirse. Algunos de ellos son la inmadurez, la soledad, el descontrol y el desequilibrio emocional y el consumo de sustancias psicoactivas.
Las claves
¿Qué puede hacer, entonces, para prevenir? Las recomendaciones de algunos especialistas como el psiquiatra Esteban Uribe es tener hábitos saludables como una buena actividad física y una alimentación balanceada.
Otros hábitos saludables los entrega Verónica Echeverry, psicóloga de Uniremington, quien explica que dormir bien, la actividad física y la alimentación son claves importantes. “La salud mental existe y en ella impacta la alimentación. Ese es como el combustible con el que pensamos y si los pacientes se alimentan mal, posiblemente la respuesta sea mala”.
Dormir es una clave. No hay nada mejor que un buen sueño, ocho horas como mínimo. En temas de ansiedad hace la diferencia. Otras maneras, que la OPS clasifica como factores de protección, son aprender sobre el manejo de las emociones como la capacidad para afrontar el estrés y la adversidad, tener una buena adaptabilidad a los distintos contextos y generar sentimientos de seguridad, dominio y control.
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También es importante cultivar las relaciones sociales afectivas y tener una red de apoyo fortalecida, como lo aseguró Juan Carlos Jaramillo, psicólogo de la Universidad CES: “Creen una red de apoyo en la que se sientan acogidos y escuchados. Si comienzan a sentirse mal es importante que no se aíslen y lo compartan con las personas de confianza. Si no lo hacen se sentirán solos y en el aire. Por el contrario, si lo conversa con su círculo de apoyo lo más seguro es que ellos lo escucharán y usted se sentirá un poco mejor”.
Otro llamado que hace el psicólogo es a “pelear contra el estigma” porque una buena higiene mental es asistir a terapia psicológica así no se sienta ansioso o deprimido. Tener un profesional con quien conversar sobre los problemas de la vida puede prevenir una ansiedad o depresión, ya que ellos entregan bases para que las personas aprendan a controlar las emociones y sortear los momentos difíciles que podrían ser detonantes de alguno de estos trastornos.
Psicólogos y psiquiatras consultados han reportado que enfrentarse a situaciones de duelo por la muerte de un ser querido o una ruptura amorosa, una mala situación económica o un exceso de carga laboral podrían ser los detonantes perfectos.
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Si tiene buenas bases en el manejo de sus emociones no correrá tanto peligro.Otros factores de protección contra los desórdenes mentales que cataloga la OPS son tener una buena autoestima y no ser dependiente, tener un crecimiento socioemocional y habilidades y destrezas sociales en el manejo de conflictos.
No hay una manera correcta
Hay que aprender a navegar por las dificultades de la vida de la mejor manera y esto se hace aprendiendo y educándose. Por ejemplo, ante el fallecimiento de un ser querido puede hacerle un duelo positivo, haciendo alguna actividad favorita de esa persona, para despedirla de la mejor manera mientras disfruta y lo recuerda. Dese espacio para sentir las emociones.
La psicóloga Verónica Echeverry, de Uniremington, dice que a veces lo más importante es dejar fluir las emociones. “Hay que ser consciente de cada emoción que está viviendo. Los seres humanos a veces reprimimos lo que sentimos y las negamos. Que no sea así: si está alegre, vivir la alegría, pero si está triste, es importante vivir la tristeza, la rabia, la angustia o el estrés. De las emociones aprendemos e identificamos lo que nos sucede”.
La desintoxicación de redes
Verónica Echeverry comenta que para la prevención de los trastornos mentales es importante un detox de las redes sociales y medios de comunicación por la cantidad de información que las personas pueden almacenar en su cerebro durante el día.
Los especialistas han notado que las personas, a veces, se sienten desbordados y saturados de todo lo que pueden darse cuenta en un solo día. En un segundo alguien puede conectarse a su móvil y encontrar desgarradoras imágenes de la guerra entre Rusia y Ucrania. Hace un pequeño scroll (desplazamiento de pantalla) y se encuentra con que un famoso se casará.
Es difícil procesar el contenido y a la vez pasar de una emoción tan distinta a otra tan rápido. La gente se siente desbordada de noticias y por eso es necesario hacer pausas.
De esta caja de herramientas escoja lo que le funcione a usted y recuerde que si comienza a sentirse mal, una mano que lo acompañe está más cerca de lo que cree. Buscar ayuda como las distintas líneas disponibles o consultar con un especialista hace la diferencia.
