Internet ha acostumbrado a sus usuarios a reír por medio de memes, en general, creados a partir de imágenes y palabras que por su gracia se vuelven virales en redes sociales.
Sarcásticos, ofensivos, o simplemente divertidos, aparecen, sobre todo, después de sucesos coyunturales o noticias virales. Pero, ¿memes de Cien años de Soledad? Sí, colmaron las redes sociales y eran realmente graciosos.
Que con ellos pueda ejercerse una acción educativa es pretencioso, afirma el coordinador académico del Colegio Cumbres, Alejandro Usma. Según el docente, pueden usarse como un medio para informar o acercarnos a algo, en el caso de las estudiantes chilenas del Liceo Carmela Carvajal de Prat, para adentrarlas en la historia de los Buendía. Usma indica que en ese contexto los memes cobran relevancia.
Cuando la profesora de lenguajes y comunicación, Jaqueline Bustamante, les solicitó a sus alumnas construir los memes fue con una función pedagógica. “A mi juicio puede ser una buena forma de atraer nuevos lectores de la novela, o al menos, despertar interés en más de uno que no quiera tomar el libro entre sus manos”, señala el coordinador académico.
Usma además explica: “La educación es un acto dialógico que está en constante cambio y evolución. Nuevas formas de aprendizaje surgen. Particularmente con la ventaja en la comunicación que implica el Internet y la conexión global, han nacido nuevos nichos o nuevas ágoras públicas que ya no son el tablero y el aula de clase, ni siquiera los patios de recreo: los blogs, los sitios web personales, los portales de opinión y las redes sociales llevan tiempo abriéndose campo”.
Para Mauricio Velásquez, docente del departamento de comunicación social de Eafit, la circulación social del conocimiento puede hacer uso de esas lógicas para transmitir ideas de otra manera, de una que, en el caso de las estudiantes, es la más cercana a ellas.
“La gente se ha vuelto una dominadora de la metáfora y la parábola a partir del meme de una forma fantástica, y eso es fascinante”.
Mauricio agrega que, por hacer eso, la profesora no es genio, pero dejó claro algunas cosas, entre ellas que a partir de un meme puede resumirse el contexto de un apartado y que hay que atender los comportamientos de las personas en Internet para, de esa manera, crear formas pedagógicas que los acerquen a diversos contenidos.