Los duques de Sussex, Harry y Meghan Markle, anunciaron este miércoles que quieren dar “un paso atrás” en sus funciones como miembros de la familia real británica y “trabajar para ser financieramente independientes”.
En un comunicado publicado por el Palacio de Buckingham, residencia oficial de la monarquía en Londres, ambos informaron que decidieron “comenzar a forjar durante este año un nuevo rol” dentro de la monarquía, al tiempo que subrayan su “completo apoyo a Su Majestad la Reina”, Isabel II.
La información también fue difundida en una publicación en su cuenta oficial de Instagram, donde afirmaron además variar su tiempo entre Reino Unido y América del Norte. “Este equilibrio geográfico nos permitirá criar a nuestro hijo con una apreciación de la tradición real en la que nació, al tiempo que brinda a nuestra familia el espacio para centrarse en el próximo capítulo, incluido el lanzamiento de nuestra nueva entidad caritativa”, escribieron.
Cuando nació Enrique, el 15 de septiembre de 1984, era tercero en el orden sucesorio. Él, que es el hijo del príncipe Carlos, el heredero de la Corona, es ahora sexto en la línea de sucesión. Muy por delante suyo está su hermano mayor, Guillermo.