x

Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

Comida y veneno: los hongos polifacéticos del Valle de Aburrá

Hay muchos tipos de hongos que se pueden utilizar para diferentes propósitos, pero hace falta investigación. Estos son algunos del departamento.

  • Los hongos más reconocidos son los comestibles. Foto EL COLOMBIANO
    Los hongos más reconocidos son los comestibles. Foto EL COLOMBIANO
Comida y veneno: los hongos polifacéticos del Valle de Aburrá
04 de julio de 2022
bookmark

Tiene la capacidad de degradar, están en la base como organismos descomponedores y participan en el ciclo de nutrientes. Pero aquí no paran sus propiedades. Los hongos, además, pueden ser alimento, medicina, tratamiento, control biológico y hasta veneno.

Son diversos, vienen en todas las formas, los colores y los tamaños y están en casi todas partes: suelos, aguas, aire, en la comida y en el cuerpo. Pertenecen a un reino propio, denominado Fungi, y son ampliamente estudiados por la ciencia llamada micología, debido a sus múltiples usos o riesgos y lo variados que son.

Estos complejos organismos, para facilidad de este artículo, serán divididos en los macromicetos y los micromicetos. Los primeros son los que se alcanzan a ver: grandes como champiñones o los que le salen a la arepa, al pan o a un humano en la piel. Los micro, en cambio, no son perceptibles a simple vista: royas en los cultivos, por ejemplo.

De alimento a veneno

No son ni plantas ni bacterias, y, de hecho, son más cercanos a los animales que a las plantas, porque sus células comparten una característica con el reino animal: tienen pared celular compuesta por quitina mayormente. (Ver infográfico)

Xiomara López Legarda, microbióloga industrial y ambiental y miembro de la Asociación Colombiana de Micología, explica que estos organismos tienen mucho potencial para utilización y se están evaluando e investigando en diferentes ramas. Pueden ser suplementos, alimentos complementarios, o aplicados en la medicina, en la lucha contra el cáncer, por ejemplo; como fungicidas en los campos de agricultura y pueden ser alucinógenos o venenosos.

Caso colombiano

Según Rocío Peña, bióloga, magíster en ciencias biológicas y profesora de la Universidad de los Andes, en el país se han registrado, hasta 2020, 7.232 especies de hongos distribuidas en los diferentes órdenes o categorías de clasificación (ver infográfico). Se les han detallado usos que van desde alimenticios hasta medicinales y se determinó que en la región Andina hay altos números de registros.

Antioquia, de royas a comestibles

Definir todos los hongos que hay en Antioquia o, más específico, en el Valle de Aburrá, sería una tarea casi imposible: requiere mucha investigación y diferenciación teniendo en cuenta la amplia variedad de sustratos que hay en la región y que son propicios para el crecimiento de diferentes tipos de hongos, como los suelos dulceacuícolas, salobres, excrementos, remanentes vegetales o animales y en organismos vivos, por ejemplo.

La ventaja de Antioquia, ubicada en la región andina, frente a otras regiones es que, según la investigación de la Universidad de Antioquia llamada Nuevos registros de macromicetes de Colombia: macromicetes recolectados en zonas urbanas de Medellín, la diversidad de macromicetes en el país “ha sido documentada principalmente en ecosistemas andinos naturales, en bosques mixtos, con algunos registros en la región de la Amazonia”. En las zonas urbanas, continúan, no hay tantos registros, son escasos, “y solo 10 especies han sido citadas en la literatura, 4 de ellas colectadas en el campus de la Universidad Nacional de Colombia en Bogotá y 6 especies de zonas residenciales de la ciudad de Medellín y el Jardín Botánico”.

En 2011 en la U. de A. hicieron una actualización de macromicetes y encontraron, de 42 colecciones, “28 especies, 26 distribuidas en 22 géneros, 10 familias y 3 órdenes de la división Basidiomycota, las especies restantes pertenecen al género Xylaria, (Xylariaceae, Xylariales) división Ascomycota. Así, encontraron ocho especies por primera vez para el país y seis para el departamento.

En términos de los hongos microscópicos, también hay amplia variedad. En este caso, con ayuda del profesor de la Universidad Nacional de Colombia, sede Medellín, Mauricio Salazar Yepes, autor del libro Pucciniales (Royas) del departamento de Antioquia y miembro del Museo de Micología de la Universidad, se hablará de aquellos que afectan específicamente a las plantas, comúnmente conocidos como royas.

En el mundo hay más de 8.000 especies de roya y en Antioquia hay registradas 328 que se encuentran en 74 familias botánicas.

Se trata de “

parásitos de las plantas que además no se pueden cultivar en medios artificiales como algunos otros hongos sí se pueden”. Necesitan de la célula de la planta para poderse desarrollar y se encuentran en helechos, pinos, gimnospermas, angiospermas y, para el caso de Antioquia y el Valle de Aburrá, “en la gran mayoría de las plantas de importancia económica para el hombre, como fríjoles, café, soya, trigo, cebada, centeno, maíz, algodón, entre otras”.

Por mencionar algunos, explica Salazar que en el Aburrá hay royas en los búcaros, en el escobillón rojo, los bambús y guaduas, en mirtáceas, en guayabas y pomas, afectado hojas, tallos y frutos.

Al café, por ejemplo, le da la Hemileia vastatrix; a la caña de azúcar la Puccinia melanocephala; al fríjol la Uromyces appendiculatus y al guayacan rosado la Prospodium cadenae.

Son exclusivas de ciertos grupos de plantas, por lo que no afectarán a todos los cultivos sino a unos cuantos y tienen “estructuras especializadas para parasitar a la planta a partir de enzimas y demás componentes. Solamente afectan a vegetales, no hay riesgo animal o humano”, dice Salazar.

Las royas, a pesar de ser parásitos, ahora están siendo utilizadas como control de malezas para no utilizar herbicidas como el glifosato, añade el experto, ya que son exclusivas de ciertas plantas y no se esparcen a los demás. Encontraron, en el problema, una oportunidad.

Infográfico
El empleo que buscas
está a un clic
Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD