El mundo del culturismo se encuentra conmocionado tras la repentina muerte de Illia Golem, el fisicoculturista checo que se ganó el apodo de The Mutant debido a su impresionante físico.
Con 36 años, 1,85 metros de altura y un peso que llegó a los 165 kilos, Golem era conocido por sus extremas rutinas de entrenamiento, su consumo de calorías exorbitante y su abierto uso de sustancias para mejorar su rendimiento.
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Aunque la causa exacta de su fallecimiento aún no ha sido confirmada, tres hipótesis principales están en discusión entre expertos y fanáticos, todas relacionadas con los riesgos asociados a su estilo de vida.
1. Ataque cardíaco provocado por el uso de esteroides
Una de las principales teorías apunta a que Illia Golem pudo haber sufrido un ataque cardíaco, como resultado de su uso prolongado de esteroides. En varias ocasiones, el culturista mencionó que consumía “cantidades extremas” de testosterona, llegando a inyectarse hasta 6 gramos por semana, una dosis que excede ampliamente los niveles recomendados incluso en el ámbito del fisicoculturismo.
Además, Golem también consumía grandes cantidades de hormona del crecimiento, lo que contribuyó a su masiva ganancia muscular.
El uso prolongado de esteroides anabólicos está asociado con un mayor riesgo de enfermedades cardiovasculares, ya que pueden causar hipertensión, aumento de los niveles de colesterol y agrandamiento del corazón. Estos factores aumentan el riesgo de sufrir infartos o accidentes cerebrovasculares, un desenlace trágico que ha afectado a varios culturistas jóvenes en los últimos años.
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2. Complicaciones por el uso de Synthol
Otra hipótesis que ha cobrado relevancia es el posible vínculo entre la muerte de Illia Golem y el uso de Synthol, una sustancia inyectable compuesta mayormente por aceite, lidocaína y alcohol benzílico, utilizada por algunos fisicoculturistas para aumentar rápidamente el volumen de sus músculos sin necesidad de entrenamiento intensivo.
Aunque Golem no se reconoció como un usuario frecuente de esta sustancia, se sospecha que pudo haber experimentado complicaciones relacionadas con su uso.
El Synthol puede provocar infecciones, daños en los nervios, embolias pulmonares y accidentes cerebrovasculares, además de la formación de granulomas llenos de aceite en los músculos. Aunque la apariencia volumétrica puede ser inmediata, los riesgos para la salud son sumamente elevados, y algunos especialistas sugieren que este pudo haber sido un factor contribuyente en la muerte de Golem.
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3. Sobrecarga alimenticia y daño hepático o renal
La tercera teoría se centra en la asombrosa cantidad de calorías que Illia Golem ingería diariamente para mantener su descomunal masa muscular.
Con una dieta que alcanzaba las 16.500 calorías al día, basada principalmente en proteínas, Golem sometía a su cuerpo a una presión constante para procesar y almacenar energía. Los expertos en nutrición advierten que una ingesta tan excesiva de proteínas puede llevar a un fallo renal o hepático, dos órganos clave en el metabolismo y la eliminación de desechos del cuerpo.
El hígado y los riñones pueden verse gravemente afectados cuando se les somete a una sobrecarga alimenticia de este tipo durante un periodo prolongado. Si bien Golem había alcanzado un estado físico impresionante, este esfuerzo constante podría haber pasado factura, contribuyendo a un colapso orgánico que desencadenara su fallecimiento.
La leyenda de Illia Golem
Illia Golem, cuyo verdadero nombre era Illia Yefimchyk, nació en la República Checa y desde joven se inspiró en figuras como Arnold Schwarzenegger y Sylvester Stallone para dedicarse al culturismo.
Aunque no alcanzó el estatus de profesional, su imponente físico y su presencia en redes sociales, particularmente en YouTube, le permitieron ganar popularidad en la comunidad del fitness. Con más de 50.000 suscriptores, Golem compartía abiertamente su experiencia con el uso de esteroides, la testosterona y otros métodos controvertidos para aumentar su masa muscular.
Apodado The Mutant, Golem se ganó el respeto de miles de seguidores por su inquebrantable dedicación al fisicoculturismo, pero también fue objeto de críticas debido a los riesgos que asumía para alcanzar su tamaño. Capaz de levantar pesos increíbles, como 272 kilos en press de banca y 317 kilos en peso muerto, Golem fue una figura polarizante en el mundo del fitness.
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Ahora, su muerte reabre el debate sobre los peligros asociados a los métodos extremos en el fisicoculturismo, dejando un legado de asombro y advertencia para quienes buscan llevar sus cuerpos al límite.
