Hace unos 15 años, la mayoría de referentes culturales y sociales se veían en la televisión y escuchaban en la radio. En la actualidad el panorama es distinto: esas figuras están en las redes sociales. Y se les conoce como influenciadores: mueven masas de seguidores, producen contenidos de valor, facturan con sus publicaciones.
Entonces está la persona experta en gastronomía a la que se le conoce como food influencer, o los que hablan de temas de salud (medinfluencers), los fashion influencers (moda) o los pet influencers (mascotas). La lista es larga y variada. En su mayoría, son profesionales que aprovechan su conocimiento, su formación, para compartirlo con las personas que consumen los novedosos contenidos que producen.
Enrique Segura, director de desarrollo de negocio de Hotmart para Latinoamérica, dijo que de acuerdo con la evolución del mercado, los nichos están creciendo y otros de los más importantes, que en cualquier rincón del mundo son los que más demanda tienen y más funcionan, son los relacionados con las finanzas, desarrollo personal, aprendizaje de idiomas y espiritualidad. “Estamos viendo nuevos perfiles que antes no eran tan visibles o que solo se dedicaban a hacer campañas pagadas a cambio de un post. Cada vez más estas personas están viendo una oportunidad para monetizar su conocimiento y su audiencia”, explicó.
Es decir, la labor de los influenciadores (o microinfluenciadores porque se especializan en un tema concreto) se ha venido transformando en los últimos años, porque el chip les ha tocado cambiarlo para pasar a ser una especie de mentores que enseñan sobre los temas en los que son expertos: esto trae como consecuencia más horas de estudio y preparación; quitar el miedo escénico frente a la cámara para hablarle a una comunidad fiel; aprender sobre el manejo de equipos de tecnología para editar videos. En algunos casos todo este proceso lo hacen solos, pero llega un momento en el que comienzan a escalar y necesitan un equipo. Y ahí es cuando también deben desarrollar habilidades de liderazgo.
Los medios sociales han dejado de ser solo ventanas de entretenimiento y lugares de socialización para convertirse además en un entorno donde los usuarios buscan información. Lo relacionado con la salud es uno de los más demandados, dijo Silvia Martínez, profesora de la Universidad Abierta de Cataluña (UOC).
En este punto, sobre todo, cobran relevancia, por ejemplo, los medinfluencers, profesionales del ámbito de la salud que usan sus redes para compartir contenidos de valor y de alguna manera se convierten en referentes para sus comunidades virtuales.
“Al ser una vía habitual con fin utilitarista o informativo, no es de extrañar que con la pandemia también recurriéramos a ellas para encontrar recomendaciones, consejos o testimonios relacionados con la Covid. Este comportamiento, que ya existía, se ha podido incrementar por la situación concreta que estábamos viviendo en la pandemia, y ello ha podido hacer que ciertos perfiles se hayan popularizado más”, explicó la docente.
El valor de los medinfluencers reside en que no son prescriptores de productos, no envían fórmulas médicas, sino que basan su actividad en aportar conocimiento, luchar contra la desinformación y desmontar falsas creencias.
¿Son los nuevos referentes?
Estos nuevos rockstar, y tiene todo el sentido llamarlos así porque por lo general su contenido lo consumen las nuevas generaciones que están todo el tiempo pegadas a las pantallas, influyen en muchos casos en las decisiones de sus públicos, sea en algo bueno o malo. Les creen.
“La realidad de hoy es que los jóvenes están siendo educados por los referentes de las redes sociales, plataformas que en su mayoría proyectan un estilo de vida y experiencias, pero la pregunta siempre es si estas personas están descrestando o inspirando a sus seguidores”, dijo Roberto Rave, fundador de la corporación de creadores de contenidos Laick.
Y aquí es donde aparecen estas nuevas figuras que crean contenido para un nicho específico con valor agregado, enseñan algo. Su importancia y popularidad cada vez es mayor. Solo en Colombia, este mercado tuvo un crecimiento de aproximadamente el 35% con respecto al año 2020, según FuelYourBrands, la plataforma que conecta a marcas con microinfluencers para la creación de campañas.
“Al tener una conexión emocional más cercana con sus seguidores, tienen la capacidad de generar un impacto más profundo y duradero en la mente de estos, lo que se traduce en una mayor receptividad y en una relación más sólida entre la marca y sus consumidores”, dijo Jesica Alcalde, CEO y cofundadora de FuelYourBrands.
La figura del influencer juega un papel protagónico en la reputación tanto de la marca personal del que crea el contenido, como de la marca que promociona, dada la influencia que tienen en sus seguidores. Según el Digital Marketing Institute, más del 60% de gerentes de marketing consideran efectiva la estrategia de influencers y más del 50% de los consumidores indicó que sus decisiones de compra están basadas en recomendaciones de ellos.
Y eso no es todo: el reporte de Remitly, con base en datos de Google, indicaba que para el 2022 ser influenciador ocupaba el primer puesto de los trabajos más soñados en Colombia y varios países de América Latina.
Teniendo en cuenta este panorama, la Universidad del Rosario, la Universidad del País Vasco y la Universidad Técnica Federico Santa María de Chile recientemente publicaron un estudio sobre el impacto de los influenciadores y uno de los hallazgos que encontraron los investigadores es que algunos de los motivos más importantes para seguir estas figuras de las redes sociales es el sentimiento de admiración y conexión con ellos.
“Los influencers deben demostrar autenticidad y familiaridad a través de compartir sus hábitos y detalles de su vida, y proveer contenido que demuestre a los seguidores que son expertos en un nicho, como por ejemplo belleza, deportes o salud”, dijo Mario Paredes, vicedecano de la Escuela de Administración de la Universidad del Rosario.
Los influenciadores son una de las herramientas más poderosas para 2023 y los próximos años. Una tendencia que está creciendo de manera acelerada, debido a la diversidad de experiencias digitales y el auge del consumo de video. Según Forbes, el influencer marketing ha tenido un crecimiento sostenido durante los últimos años, con un mercado aproximado de 15 billones de dólares en 2022 y un crecimiento esperado del 14.5% para este año.
Juliana Álvarez
Creadora de contenidos de repostería
@julianapostres en instagram
Hace más de 12 años, esta repostera aterrizó en las redes sociales: a la primera que llegó fue a Facebook, porque siempre ha tenido claro que al que no ven, no le compran. En sus inicios también aparecía en los medios de comunicación de Medellín donde era invitada para enseñar recetas. “Más que ser creadora de contenido, lo más retador es crear empresa, contratar gente, saber sobre derecho laboral, eso es lo complejo. Escribir, poner la foto, hacer reel es para mí un disfrute”, dijo. En sus publicaciones enseña sobre repostería: cómo hacer galletas, postres, tortas, pero además deja ver un poco de su vida. “La mayoría de la gente que me sigue son mujeres, conectan mucho con mi historia, soy mamá soltera, cómo lograr lo que se quiere”. La mayoría de las fotos que comparte las toma ella misma con el celular, hizo un curso de fotografía. Durante la pandemia su hermano le enseñó a grabar los videos y editarlos: en ese momento el canal de YouTube tenía 300.000 suscriptores, hoy supera los 1.200.000. “Uno puede tener el saber, pero lo más importante es conocer lo que la gente necesita, leer lo que escriben, el público es fundamental, ser agradable y seguro frente a la cámara también, vender de una manera bonita”. Recientemente, fue jurado del reality Bake Off Celebrity Colombia de HBO Max.
Juan Pablo Forero
Creador de contenidos de tecnología
@elprofe.jorge en instagram
Antes de ser creador de contenido, Juan Pablo o “El Profe”, primero fue bloguero. Escribía sobre sus experiencias laborales: tuvo una tienda donde brindaba el servicio de soporte técnico. Pero antes de todo, también laboró para una empresa de telecomunicaciones en el Eje Cafetero, porque es ingeniero electrónico de profesión. Pasó de vender equipos y arreglarlos, a enseñar trucos tecnológicos en las redes sociales: consejos que le hacen la vida más fácil a la gente. Cómo elegir el celular ideal, cómo mejorar la conexión WiFi de la casa y trucos de ciberseguridad, son algunos de los temas que Forero habla. “Lo más retador en esto es la marca personal, porque si no se construye un sello propio será una copia de lo que otros hacen”, dijo. En este proceso le ha tocado aprender de todo: edición de video, uso de las cámaras y audio, iluminación. La gente que lo sigue se caracteriza por tener edades entre los 24 y 35 años, son personas con un poder adquisitivo mayor y toman decisiones a partir de las experiencias de expertos como él. “Es un público que no es tan fiel como el más joven, pero es de alto impacto”. Dijo que ser creador de contenido enfocado en tecnología trae una responsabilidad muy grande porque todo el tiempo debe pensar en la claridad de los mensajes que transmite para que se comprendan.
Alba Lucía Guerrero
Creadora de contenidos de Fisioterapia
@albaluciafisioterapia en instagram
Es fisioterapeuta egresada de la Universidad Nacional de Colombia y tiene 30 años de experiencia profesional. En los últimos meses la vida le cambió, porque encontró en las redes sociales una manera diferente de llegarle a más personas, aunque reconoce que todo esto es un mundo nuevo para ella. “Me ha tocado aprender a crear contenido de la mano de expertos, cómo grabar un video, el tiempo de duración, qué mensajes decir. Me ha parecido una experiencia muy novedosa”, explicó. Además, Guerrero dijo que varias han sido las oportunidades que se le han presentado en este nuevo trabajo: “Como soy docente, en las redes sociales también encuentro una oportunidad de preguntar e interactuar con los seguidores, estudiantes y colegas que me siguen, eso ha sido una parte muy bonita de esta nueva experiencia”. En sus videos comparte tips básicos sobre ejercicios para llevar a cabo el proceso de recuperación desde casa, por ejemplo. Los usuarios que más consumen sus contenidos están en Colombia, Estados Unidos y España, con edades entre los 24 y 45 años. Sus redes sociales además se vienen convirtiendo en un nuevo canal de comunicación para incluso ofrecer sus servicios en la ciudad de Bogotá: tiene nuevos pacientes, un voz a voz que se viene activando por estas plataformas.
Sebastián Matías Romero
Creador de contenidos de derecho @matiaslawyers en instagram
El amor por la música y su formación como abogado con maestría en Propiedad Intelectual y Nuevas Tecnologías hicieron que Romero decidiera convertirse en creador de contenidos, encontró un potencial ahí para darse a conocer y compartir sus conocimientos relacionados con los derechos de autor, contratos musicales y otros aspectos legales fundamentales en la industria musical y del entretenimiento. Uno de los retos más grandes a los que se ha tenido que enfrentar en este nuevo rol ha sido el tener que pararse frente a la cámara y hablar de manera fluida. Y eso no es todo: tener que aprender sobre comunicación asertiva y uso de herramientas de edición. En estos años como influenciador, Romero ha participado en campañas publicitarias, asistido a importantes eventos y conectado con más personas. El público que más lo sigue son artistas emergentes que buscan conocer la parte legal de la industria musical. “Es importante reconocer que los influencers no solo tenemos la responsabilidad de entretener, sino también de educar y promover mensajes positivos. El contenido que producimos puede afectar la forma de pensar y actuar de los seguidores, por lo que es fundamental ser conscientes de la calidad y el valor que nos aporta”, dijo el abogado graduado de la U. de Antioquia.
El caso de Marce la recicladora
Con más de 370.000 seguidores en Instagram, Marce La Recicladora transmite su pasión por el reciclaje en sus videos. En un prinicipio se creyó que Sara Samaniego, como se llama en la vida real, era recicladora, pero con el tiempo se supo que esta bogotana lo que hizo fue crear el personaje para crear conciencia sobre la importancia de separar los residuos correctamente. Este es un ejemplo de otro tipo de perfil dentro del mundo de los influenciadores.