El presidente Santos y sus delegados en La Habana y quién sabe dónde más, son expertos en hacer piruetas verbales para un día decir una cosa y, al otro, decir otra, diametralmente opuesta, con tal de que no fracase el proceso de negociación con los grupos guerrilleros, que a su vez negocian con drogas ilícitas y hacen terrorismo. ¿O no lo será que el Eln haya ejecutado sumariamente a doce miembros de la Fuerza Pública y a un soldado en Anorí que vigilaban el proceso electoral? Paz en sus tumbas y solidaridad con sus familias.
¿Cómo afirma Santos que las del domingo fueron las elecciones más pacíficas de los últimos tiempos? Él tenía que estar informado. ¿Será que no ejerce el mandato Constitucional de ser el Comandante en Jefe de las Fuerzas...