Entre las cosas bonitas que han llegado a mis manos durante este año puedo incluir la revista Espiritualidad y religiones, editada y distribuida por Comfama el pasado domingo. Más que bonita, es una invitación, muy necesaria, a emprender “un viaje espiritual hacia el sentido trascendente de nuestra vida”, donde “todas las religiones y rutas son válidas a la hora de hacer ese ejercicio de introspección individual llamado espiritualidad”. De muerte lenta, como dicen las señoras pinchadas. De leer, degustar, guardar, releer y poner en práctica todos los días de nuestra vida, después de tanto ruido vano.
A la par con la revista me llega una noticia con similar intención: Entre hoy y el 6 de enero, estará en Colombia Sant Rajinder Singh Ji Maharaj, Maestro y líder mundial en el arte de la meditación.
No sé si la invitación de Comfama para vivir un año espiritual y la visita del Maestro para hablar de la meditación como medicina para el alma sean coincidencia o casualidad, pero “algo tiene el agua cuando la bendicen”.
Ahí quien lo ve, con su barba espesa, la vestimenta típica de India, su país, y el pagri en su cabeza, Rajinder, como le dicen en la casa cuando lo llaman a almorzar, es un ingeniero electrónico graduado en el Indian Institute Of Technology Madras y maestría en el Illinois Institute of Technology de Chicago, pero ya no ejerce. Cambió circuitos, electrones y disipadores por corrientes de luz y sonido dentro de nosotros mismos, para enseñarnos a contactar con la Fuente, o cualquier nombre de Dios con el que se sientan a gusto. No en vano es el líder de la Ciencia de la Espiritualidad, una organización internacional no religiosa, sin ánimo de lucro, convertida hoy en una tribuna abierta a la enseñanza del arte de la meditación como un instrumento de transformación interna y externa.
Sant Rajinder Singh Ji ha hecho de la meditación una práctica individual independiente de la religión que se profesa. Por esa vía ha procurado una mayor vivencia de la espiritualidad en los tiempos modernos. Afirma el Maestro que el mayor beneficio de la meditación no es otro que la búsqueda de la paz, tener vidas más profundas, un sentido más sólido del propósito de la existencia y un mundo más pacífico y amoroso, porque a medida que encontramos paz interior, la irradiamos a nuestras familias, a las comunidades, a las ciudades y a los países.
En la vereda El Rosal, en Rionegro, el Maestro Rajinder inaugurará el sábado 4 de enero un moderno centro de meditación. Y el domingo 5, a las 4:00 p.m. en el Pabellón Verde del Centro de Convenciones de Medellín, ofrecerá una charla pública titulada “Recibe los rayos del sol espiritual” (psss, psss, ¡con entrada libre!) porque Rajinder no cobra por los servicios que ofrece a la humanidad. Los interesados en asistir pueden llamar al 301 438 07 98.
Nuestra alma está reseca y hay que alimentarla. Y que 2020 sea un año de luz y amor para todos. Amén.