Dolor de patria nos produjo a muchísimos colombianos ver cómo fue manipulada la juventud en las pasadas elecciones, empezando por la satanización que ha sufrido la persona de Álvaro Uribe: como si los “falsos positivos” él los hubiese ordenado, asesinatos realizados por enfermos mentales que por ganarse un reconocimiento, fueron capaces de matar a jóvenes inocentes.
¿En qué empresa no se estimulan los buenos resultados con reconocimiento a quien los produce? Pero a nadie se le pasa por la mente asesinar inocentes por ganarse inmerecidamente un reconocimiento.
Decían que era el gobierno más corrupto y mil acusaciones más. Inventivas falsas en su totalidad, pero repetidas hasta la saciedad han hecho que la juventud que NO vivió la historia real...