“No hay nada que se perciba y se sienta con tanta agudeza como la injusticia”, dice Pip en Grandes esperanzas, la novela de Charles Dickens. Estas palabras toman hoy un potente sentido en mis reflexiones y en la lucha, que por mi honra, emprenderé desde ahora para recuperar mi tranquilidad y la de mi familia. Como es de dominio público, en las semanas recientes se vinculó mi nombre y el de mi hijo Mauricio Lizcano —actualmente presidente del Senado—, a la supuesta censura de un trabajo periodístico que investigaba la compra de unas tierras por parte de nuestra familia.
Hoy nos enfrentamos a un nuevo reto de la vida y estoy seguro de que pronto reconquistaremos nuestra honra. Don Quijote dijo a Sancho Panza: “por la libertad, así como por la honra,...