Transportar un contenedor desde Bogotá hasta los puertos del Caribe para su exportación puede costar por lo menos 2.450 dólares. Pero si se hace por tren, este valor se reduciría a 1.800 dólares aproximadamente. Es decir, 26,53% menos.
Este cálculo hace parte del plan de reactivación de la red ferroviaria del país, con el que Mintransporte ha invertido, por el momento, alrededor de $464.000 millones en contratos para la operación de corredores férreos, mientras saca a licitación la Asociación Público-Privada (APP) del tramo La Dorada – Chiriguaná, a 10 años, que está para publicarse el próximo 21 de mayo, así lo confirmó la ANI a EL COLOMBIANO.
Y ahora se está hablando más de rieles, vagones, estaciones, motores y red férrea porque, en este mes, dos sectores cruciales de la economía colombiana se sumaron a movilizar su carga por tren, como ya lo hace la actividad minera en La Guajira y el Cesar.
Este medio, gracias a su versatilidad por múltiples vagones y plataformas planas permite la movilización de una amplia gama de mercancías y que se pueden adaptar a cualquier tipología de carga, como minerales, mercancías a granel, coches, camiones, materiales para construcción, productos comerciales en general.
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Los dos hechos recientes
Primero fue el turno para la Federación Nacional de Cafeteros, que transportó, el pasado 16 de abril, desde La Dorada 160 toneladas de café excelso para exportación, en 160 empaques, hasta Santa Marta, bajo el argumento de abril nuevas posibilidades logísticas, reducir costos de transporte y emitir menos gases de efecto invernadero.
Con este hito, sería el cuarto envío por tren del gremio cafetero desde el 2019.
“Un tren de carga emite 4,5 veces menos CO2 y material particulado que el transporte por carretera. Para transportar cerca 160 toneladas de café por carretera se necesitan 5 tractomulas que consumen 650 galones de Acpm, mientras que en el transporte ferroviario solo se requiere una locomotora con 5 plataformas que consume 153 galones de Acpm”, explicó Germán Bahamón, gerente de la Federación de Cafeteros.
El siguiente turno fue para la compañía cervecera Bavaria, que anunció esta semana el envío de 10 mil toneladas de sus productos a través del corredor férreo más largo de Colombia, con una longitud de 767 kilómetros, que pasa por los departamentos de Caldas, Antioquia, Santander, Cesar y Magdalena.
Lo harán a través de tres frecuencias de tren al mes con capacidad de 20 vagones.
Por lo tanto, esta compañía incursiona en el tren para optimizar el consumo de combustible, ahorrar costos logísticos en la distribución, así como las horas de recorrido entre sus cervecerías y centros de repartición.
“El sistema ferroviario es conocido por ser de los más eficientes para el transporte, capaz de reducir significativamente las emisiones de gases de efecto invernadero al emitir hasta nueve veces menos CO2 y material particulado que el transporte por carretera”, calculó Sergio Rincón, presidente de Bavaria.
Esto dos hechos ejemplifican cómo el tren, al ser un medio de transporte, puede mover grandes volúmenes de carga con menor impacto ambiental y a un costo menor.
Además, empezaría a aliviar la congestión en las carreteras de mulas y camiones, y se reduciría la dependencia del transporte automotor, lo que a su vez disminuiría la huella de carbono del sector logístico del país.
Así lo ve Nicolás López, asociado principal del área de Infraestructura en Cuatrecasas, quien sostuvo que el incremento en mercancía transportada en el corredor La Dorada – Santa Marta es alentador porque hace más atractivo el desarrollo de esta infraestructura para financiadores e inversionistas.
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“Este interés creciente es crucial, considerando que proyectos de gran envergadura suelen financiarse mediante esquemas de “project finance”, donde la viabilidad para los inversores depende en gran medida de una demanda comprobada para cubrir a futuro el repago de la deuda y generar mayor rentabilidad”, consideró el abogado.
Estas noticias, según López, pronostican un mejor panorama para la financiación de nuevos proyectos férreos al demostrar que es una infraestructura utilizada por grandes compañías en Colombia.
“En otras palabras, el hecho de que Bavaria le dé un voto de confianza a los ferrocarriles ayudará a que muchos proyectos pasen del papel a la realidad al demostrarse que hay una demanda atractiva para los inversionistas”.
‘Tren que pasa por aquí...’
Lo dicho en párrafos anteriores hay que pasarlo a números, por eso, con lápiz, papel y calculadora, Gustavo Ruiz Agudelo, experto en movilidad y transporte, y exgerente de la Promotora Ferrocarril de Antioquia, comparó el modo carretero, fluvial y férreo en eficiencia, emisiones de CO2 y capacidad.
Por ejemplo, con un litro de combustible un barco puede recorrer 243 km, un tren 213 km y un camión 35 km. Y al pasarlo a indicadores de contaminación, el experto precisó que, si un barco transportara una tonelada durante un kilómetro generaría 11,9 gramos de CO2, el ferrocarril lo hará en 19% más y el camión en 533% más.
En cuanto a capacidad, lo que puede transportarse en un barco, se mueve en un ferrocarril con 301 vagones y, por carretera se requieren 963 camiones. Para dimensionar estos datos puso el siguiente ejemplo:
“Desde Bogotá a la región Caribe hay cerca de 960 km, en donde la carga se traslada principalmente en camión y se mueven cerca de 137 millones de toneladas al año por ese corredor. Para movilizar esa cantidad de carga se requieren 176 camiones que generan 9,9 millones de toneladas de CO2, mientras que si utilizo un tren con 100 plataformas traslado esa misma cantidad y produzco 1,8 toneladas de CO2”.
Por eso, Ruiz insistió en que el tren potenciará la competitividad en Colombia, teniendo en cuenta que la Encuesta logística Nacional 2022 del Departamento Nacional de Planeación reveló que el costo logístico está en 17,90%, es decir, de cada $100 que facturan las empresas, destinan en promedio $17,90 a financiar sus costos logísticos de producción y distribución de sus productos y servicios.
La meta de a 2030 es que sea del 9,5% para llegar a niveles de la Ocde.
“Dentro del costo logístico, lo que más pesa es el costo de transporte y distribución, 35%, por lo tanto, resulta concluyente la necesidad de disponer de modos para el transporte masivo de carga como es el ferrocarril”, apuntó el experto.
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Por eso, puntualizó que empresas que se suban al tren como opción de transporte reducirán sus costos logísticos entre un 10% y 15%.
“Las empresas tendrán mayores ventajas comparativas y de eficiencia que el modo carretero, por el transporte de grandes volúmenes de carga a largas distancias, disminuyendo las emisiones que antes hacían a través de vías”.
Otra variable es la velocidad y horas de transporte. Según el ingeniero civil Germán Rodríguez, experto en transporte férreo, en la actualidad, una frecuencia del tren entre La Dorada y Santa Marta demora hasta 23 horas, y con la optimización de la red, ese tiempo se reduciría entre 15% y 20%. Es decir, el trayecto se acortaría entre 3 horas 45 minutos y 4 horas.
Rodríguez agregó que con las inversiones de la APP a mediano plazo el tiempo pasaría de 23 horas o 22 horas a 15 horas.
Hay que recordar que el principal cliente del corredor La Dorada-Santa Marta es el carbón que moviliza Drummond, entre Chiriguaná y Santa Marta, con 31 millones de toneladas en el 2023.
Sin embargo, se mueven otras cargas como acero, materia prima para la fabricación de papel, cerámica y envases, insumos químicos, productos terminados de plástico y cerámica, de consumo masivo como papel higiénico, café y aguacate hass.
“Este corredor hoy tiene una capacidad para transportar 5 millones de toneladas al año, sin embargo, en máquinas o material rodante (trenes y plataformas) solo podría transportar hasta 360.000 toneladas al año”, alertó Ruiz.
Los planes de Mintransporte
El Ministerio de Transporte no cogió carretera, pero sí avión hasta Londres para buscar ayuda en su plan de reactivar la red férrea colombiana. Hasta allá fue la viceministra de Infraestructura, María Constanza García, quien anunció esta semana que Colombia establecerá una nueva oficina dedicada a la gestión de proyectos para revitalizar el sistema ferroviario nacional, la cual recibirá colaboración del Reino Unido.
El subsecretario de Transporte británico, Lord Davies de Gower, también confirmó que el Gobierno británico y la embajada a través de Crossrail, aportaron para la conformación de la oficina, con el fin de que el país tenga mejores estándares de calidad y prácticas internacionales en temas como la “regulación, financiación, sostenibilidad, transformación digital y gestión de portafolios de infraestructura”.
Hay que recordar que Crossrail International, una agencia del gobierno del Reino Unido fundada en 2017, forma parte del Ministerio de Transporte británico. Su objetivo principal es compartir su experiencia internacional en el ámbito ferroviario.
Es así como, el plan es poner a toda máquina el corredor La Dorada-Chiriguaná, de 521 km, en donde se registró un crecimiento del 104% en la eficiencia. En 2023, se logró movilizar 182.000 toneladas, frente a las 89.000 del 2022.
Para administrar, mantener y operar este corredor, se suscribió un contrato de obra pública por $71.715 millones, el cual se sincronizará con el inicio del contrato de APP previsto para ser adjudicado ahora en mayo como se dijo anteriormente.
Otra fecha tentativa es para sacar a licitación la APP es el 17 de junio, así lo confirmó Iván Baquero, gerente de proyectos férreos y representante de la Vicepresidencia de Estructuración de la ANI, quien afirmó que están a la espera de un concepto de Minhacienda, y con eso garantizar una concesión por $3 billones del tren La Dorada – Chiriguaná, para 346 intervenciones de infraestructura nuevas.
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La firma del contrato se daría en diciembre de 2024, que incluye también la construcción de un nuevo centro logístico de carga en La Dorada, la construcción de dos talleres: uno de gran magnitud en Barrancabermeja y otro de menor tamaño en Chiriguaná. Así como la reparación de 192 kilómetros de la red férrea.
Con esto se completa una longitud de la red férrea de 1.800 km en óptimas condiciones y capacidad de transporte de 5 millones de toneladas al año.
“Las responsabilidades del concesionario, además de rehabilitar la red férrea, es generar toda la infraestructura logística, operar el corredor, construir un edificio administrativo y un centro de control, así como tener a punto las 5 locomotoras existentes y agregar 2 más. Reemplazar la mitad de los rieles por unos de 115 libras por yarda y todas las traviesas de madera por traviesas de concreto. Además, construir 150 plataformas de carga e implementar un sistema de señalización de última tecnología. Y adecuar 28 estaciones”, detalló Baquero.
De este modo, la agencia proyecta una reducción, en promedio, de 26% de los costos de transporte en el país.
Sin olvidar que ya el corredor Chiriguaná-Santa Marta, de 246 km, está bajo la administración del concesionario Fenoco, que en 2023 movilizó 30,9 millones de toneladas de carga. Y el corredor Bogotá-Belencito, con 257 km, opera a través de un contrato interadministrativo con Findeter, con una inversión de $125 mil millones.
El tren retoma sus rieles en Colombia
Ante este panorama Sandra Milena Rueda, subdirectora de Formulación y Evaluación de proyectos de la Unidad de Planeación de Infraestructura y Transporte (Upit), consideró que ya hay un arranque del tren, con un crecimiento más allá de los sectores tradicionales como el carbón.
“Este resurgimiento del tren en Colombia abre un abanico de oportunidades tanto para las empresas que buscan transportar o exportar. El tren fue uno de nuestros modos de transporte que hace muchos años abandonamos, lamentablemente, y que recuperarlo ha sido todo un proceso, pero hemos generado confianza e impulso en el sector privado”, indicó Rueda.
En esta misma línea, José Stalin Rojas, director del Observatorio de Logística y Movilidad de la Universidad Nacional de Colombia, sostuvo que el tren afortunadamente está reviviendo, no solo para mover cemento o minerales, sino para transportar productos manufacturados.
“Si bien hay un atraso histórico y en términos tecnológicos la trocha es angosta, es alentadora la ayuda del Gobierno británico y que algunas de sus empresas ayudar a actualizarnos en el modelo de negocio. Esto es un paso gigante para la modernización de los trenes en Colombia”, dijo el académico.
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Rueda añadió que el tren refuerza la intermodalidad del transporte del país, es decir, la conexión con otros modos de transporte. Por ejemplo, en La Dorada llega la carga en camiones, que luego pasan al tren.
“Esto da confiabilidad, seguridad y rapidez, eso hace atractivo al tren para el transporte de carga”, aseguró la directiva, quien hizo referencia a la reducción de emisiones, mayor seguridad y consolidación de volúmenes en menor tiempo.
Estas oportunidades también las vio Rojas, en especial la multimodalidad, no solamente en conectar a los puertos con las ciudades, en donde se produce el consumo, sino en disminuir costos logísticos y crear el ecosistema de intermodalidad, en donde confluyan tren, río y carretera.
“Esto significa que para llegar a algunas ciudades que están alejadas del sistema férreo se debe contar con puertos secos, o también con lugares donde se traslade la mercancía al transporte de carga por carretera”, enfatizó el director del observatorio.
En definitiva, Nicolás López, abogado del área de Infraestructura en Cuatrecasas, afirmó que la modernización de la infraestructura ferroviaria podría ofrecer una alternativa competitiva al transporte por carretera, que actualmente predomina en Colombia.
“El tren puede mover grandes volúmenes de carga con menor impacto ambiental. Además, la mejora de la red ferroviaria podría aliviar la congestión en las carreteras y reducir la dependencia del transporte automotor, lo que a su vez disminuiría la huella de carbono”, concluyó el abogado.
