Según La Lonja, este mercado mueve $320 mil millones al año, liderado por el Aburrá y Oriente cercano.
El negocio de renta corta o vivienda turística va a toda marcha en Medellín y el Valle de Aburrá. Según La Lonja, en los últimos tres años la oferta de inmuebles para esta actividad pasó de 7.000 a 15.000, un incremento del 115%. Por si fuera poco, la construcción de proyectos para ello también proliferó.
Entre el Área Metropolitana y Oriente Cercano, La Lonja ha monitoreado unos 30 iniciativas con precios entre los $7 millones y los $18 millones por metro cuadrado. Además, uno de los datos más certeros es que este negocio está moviendo $320.000 millones al año en estas montañas.
“En Colombia, existe un marcado interés de las personas por invertir en vivienda para alquilar. Aproximadamente el 20% de las viviendas nuevas construidas en el país son compradas por inversionistas e ingresan al mercado de arrendamientos, cifra muy superior a todos los países de la región”, destacó Federico Estrada, gerente de La Lonja.
Un análisis del portal Ciencuadras hecho para EL COLOMBIANO muestra cómo la renta corta en Medellín ha experimentado un aumento significativo en diversas zonas, especialmente El Poblado, Laureles - Estadio, Villa Hermosa, Buenos Aires y La Candelaria.
🏡 ¿Cómo se comportó durante el 2023 el mercado inmobiliario en el Valle de Aburrá, oriente y occidente cercano?
— La Lonja: El gremio inmobiliario (@LonjaGremio) January 24, 2024
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Este incremento, precisó, ha jalonado los precios en municipios aledaños como Envigado, Rionegro y Sabaneta que desde 2022 vienen ocupando el top 10 de mayor oferta en el país, lo que ha generado que las tarifas de alquiler en el departamento suban.
“En Ciencuadras observamos que las publicaciones de los inmuebles en arriendo en Antioquia vienen en aumento desde el 2020 siendo este aumento considerablemente mayor entre el 2022 y el 2023 (381%), especialmente en los meses de noviembre y diciembre del 2023”, agregó.
La reglas del juego
Alfonso Álvarez, CEO de Asurbe, recordó que si bien esta tendencia viene desde hace varios años, ahora ha tomado velocidad por plataformas como Airbnb, el crecimiento del turismo y las nuevas tendencias de hospedaje de los viajeros.
En efecto, cifras de la Alcaldía de Medellín muestran cómo en 2022 arribaron 1,38 millones de visitantes a la ciudad, mientras que para el cierre de 2023 se estima que la cifra escaló a cerca de 1,5 millones, provenientes principalmente de Estados Unidos, Panamá o México.
Por eso, la renta corta se está convirtiendo en una opción atractiva, pero hay normas para cumplir. “El propietario debe verificar que en el reglamento de la unidad esté claro que se le puede dar esa destinación para vivienda turística. A partir de ahí, cumplir con el Registro Nacional de Turismo y otros requisitos”, dijo Álvarez.
En particular, el Decreto 1836 de 2021 del Ministerio de Comercio contiene todo la normativa relacionada a vivienda turística.
Pros y contras
De acuerdo con La Haus, entre los beneficios de la renta corta están los ingresos extra para el arrendador, “ya que puede cobrar una tarifa más alta por noche que el alquiler mensual regular”; mayor flexibilidad sobre los días en los que se arendará la propiedad; o un menor desgaste de esta debido a la rotación.
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Pero también hay contras. “Hay un fenómeno en Medellín, que como indican varias fuentes es la turistificación y la gentrificación. Además, casos de personas que toman en arriendo un inmueble, luego subarriendan por Airbnb y los copropietarios llaman preocupados porque en los apartamentos o penthouse hay escándalos los fines de semana o problemas con la Policía”, comentó Stephanie Rendón, abogada, y experta en contratación inmobiliaria.
Según Rendón, los constructores están viendo como oportunidad que los inversionistas piensen en renta corta antes que en arrendamientos de vivienda urbana, un fenómeno explicado “porque esta última tiene un límite en el valor del canon de arrendamiento, porque la ley 820 de 2003 dice que no se puede cobrar por un canon más del 2% del avalúo catastral de un inmueble”.
Los expertos consultados recordaron que al final el reglamento de propiedad horizontal es lo que decida la asamblea de copropietarios, con lo que es esta la que define si avala dicho modelo o lo revoca.
¿Qué esperar este año?
La Lonja estima que en el primer semestre de 2024 el sector inmobiliario mantendrá una dinámica parecida a la del –difícil– 2023, pero irá cogiendo ritmo en la medida que se den los ajustes en el programa de subsidios para vivienda y bajen las tasas.
Sobre la renta corta, el gremio calcula que esta representa el 17% de los ingresos de estadías y alojamientos en el país, mientras que en la capital antioqueña alcanzó un máximo de ocupación en 2022, con un 77%.
