En la mañana de este miércoles 28 de agosto, el presidente Gustavo Petro volvió a sorprender. Como ya es costumbre, el jefe de Estado revivió una de sus viejas propuestas: la emisión de nuevos billetes en el Banco de la República.
Lo primero que se debe aclarar es que el presidente hizo esa propuesta como una solución para reparar a las víctimas de la violencia. El mandatario sostuvo que según datos de la Procuraduría, la Defensoría del Pueblo y la Contraloría, la reparación de las víctimas costaría unos $334 billones.
Destacó que se trata de un proceso de reparación que está retrasado y destacó que invirtiendo $2 billones anuales, las víctimas tardarían 150 años en ser reparadas.
Entérese: Por Proyecto Oslo, renuncian Juan José Echavarría y Luis Alberto Zuleta a la junta de Ecopetrol
Por esa razón, Petro indicó que es necesario que se utilicen otros instrumentos del Estado, diferentes al presupuesto nacional para conseguir una indemnización de dicha población.
Agregó: “Para reparar a las víctimas en el corto plazo, en el plazo de sus vidas, es necesario emitir dinero por parte del Banco de la República. Alguna vez lo propuse en medio de la burla ignorante en el periodismo y la derecha”.
El presidente explicó que el cupo de emisión anual que realiza el Banrep debería dirigirse en efectivo o bonos a la reparación de estas víctimas.
Según la cuentas del mandatario, eso llevaría a que por un tiempo de entre 10 y 15 años, “el señoriaje de la emisión pasaría del sector financiero a las víctimas de la violencia”, anotó.
Sobre la situación también se pronunció en entravista en La FM. El jefe de cartera dijo que este país se ha comprometido con muchos acuerdos en el pasado y nunca se ha dado la reparación de estas personas. Confirmó que se está discutiendo de dónde se pueden sacar estos recursos, ya que es una porción muy grande del presupuesto con la que no se cuenta actualmente.
Además, aseguró que solo hay tres caminos: diferir ese pago o emitir nuevos billetes. “La otra opción sería por mayores billetes, pero viene de la misma discusión, ¿qué capacidad tienen realmente los colombianos de aportar los recursos para esa reparación?”.
Para los analistas, la propuesta de presidente fue interpretada como otro “globo de distracción”; sin embargo, algunos de sus contradictores se lo toman en serio y advierten que dicha propuesta traería consecuencias para la economía nacional.
