En medio de la crisis por la que pasa el sector construcción y buscando atender a la población vulnerable, la ministra de Vivienda, Catalina Velasco, anunció la derogación de la Resolución 1227 de 2023, que establecía un esquema de puntajes para la asignación de los subsidios de Mi Casa Ya.
“Buenas noticias para el sector de la construcción y para las familias que quieren comprar su vivienda nueva. Sabiendo que avanzamos en los propósitos de política, hemos escuchado a los constructores que nos han dicho que el esquema de puntaje genera confusión y que no necesariamente incentiva la producción de vivienda en las grandes ciudades, así que ha sido publicada para consulta ciudadana la derogatoria del esquema de puntajes, que creemos ya no es necesario, porque utilizar la encuesta Sisbén y las preasignaciones nos han permitido lograr los objetivos de política que teníamos”, señaló la jefe de la cartera de Vivienda.
Y es que durante más de siete años, Mi Casa Ya transcurrió bajo un modelo por “orden de llegada”, es decir, garantizaba el subsidio a quienes cumplían primero con los requerimientos de acceso que, básicamente, eran cumplir con el requisito de ingresos, no ser propietario de vivienda y no haber recibido un subsidio de vivienda en el pasado.
Pero en el Gobierno de Gustavo Petro se comenzó a buscar una mayor focalización para el programa y, de hecho, los subsidios de Mi Casa Ya vienen asignándose a través de la Encuesta Sisbén IV y otros criterios de priorización. Incluso, se adoptó un enfoque diferencial para madres cabeza de familia, trabajadoras del sector informal y otros.
No obstante, de acuerdo con el Ministerio, las modificaciones introducidas con la expedición del Decreto 490 de 2023, permitieron evidenciar la atención y cobertura deseada. Esta afirmación se fundamenta en que el 89.4% (61.102) se asignó a hogares con una clasificación de Sisbén IV en los grupos A, B y C, lo que evidencia la focalización de la política en los hogares con mayor grado de vulnerabilidad.
Dicho decreto establece los topes del subsidio a los que pueden acceder las familias. Así que los hogares más vulnerables acudieron en mayor medida buscando un mejor subsidio, que las que tenían un poco más de capacidad económica.
Por lo que, una vez aprobada la nueva normativa, la priorización volverá a darse por orden de llegada, previo cumplimiento de todos los requisitos.
¿Cuál era el esquema que se eliminó?
La resolución derogada establecía que a todos los interesados en el subsidio se les asignará un puntaje, cuyo valor máximo era de 100 puntos.
A través de este se determinaba el orden de asignación. Por ejemplo, si una persona estaba en el grupo A del Sisbén obtenía 30 puntos, pero una que estuviera en el Grupo C solo obtenía 15 puntos, por lo que la prioridad se le daba a la primera de ellas.
Dicho puntaje, además, tenía en cuenta la clasificación de las personas en la Encuesta Sisbén IV; si el proyecto estaba en zona rural o urbana; la categoría del municipio donde estaba ubicado el proyecto (categorías 5 y 6 recibían un mayor puntaje); si el proyecto era VIS o VIP (el de Intéres Prioritario sumaba un mayor puntaje) y si el solicitante era víctima del conflicto armado interno.
El Ministerio informó que durante la vigencia 2023 se asignaron 18.069 subsidios para la adquisición de vivienda de interés prioritario con una participación del 36% en las asignaciones totales del programa, porcentaje incrementó al 43% en lo corrido del año 2024, evidenciándose una mayor representatividad de este tipo de vivienda, la cual, por su valor, es aquella que adquieren los hogares con menores capacidades de ingreso.
Adicionalmente, con posterioridad a la entrada en vigencia del Decreto 490 de 2023, se han asignado 8.760 subsidios para madres cabeza de hogar, 7.481 subsidios para hogares con al menos un integrante víctima del conflicto armado y 20.224 subsidios para la compra de vivienda en municipios de categorías 3, 4, 5 y 6.