En Colombia, la mensajería, el correo certificado y los giros postales consolidan el sector postal, el cual para el año pasado mostró 625 millones de transacciones de manera conjunta, según cifras del reporte de la industria emitido por la Comisión de Regulación de las Comunicaciones, CRC (ver Gráfico).
Entre dichos sectores, el de mensajería es el que más ingresos mueve. Ejemplo de ello es que para el año pasado esta división respondió por 1,11 billones de pesos en ingresos, mientras que el de giros postales solo movió 897.000 millones y el de servicio de correo respondió por 126.000 millones de pesos. De esta manera, esta parte de la economía se acredita más de 2,1 billones de pesos anuales.
Dinámicas como el comercio electrónico incentivan el crecimiento de la actividad. Según detalla Carlos Lugo Silva, director ejecutivo de la CRC, “las empresas de mensajería expresa juegan un papel importante en la cadena de valor para el comercio electrónico; esto permitió un crecimiento de dos dígitos en los ingresos de los envíos individuales que crecieron el 10,41% comparado al 2018”.
Panorama de esta industria
¿Cómo se llega a superar los dos billones? En primera instancia, de acuerdo con el reporte, a cierre del año pasado el servicio de correo estaba presente en los 32 departamentos, por medio de 1.274 puntos de atención. Gracias a ello, se totalizaron 20,3 millones de envíos individuales y 87,37 millones de carácter masivo.
No obstante, la caída de 28,2 % en lo recogido por este subsector responde a un menor valor en lo que respecta a envíos individuales.
Una de las realidades que describe Lugo Silva, que hace más difícil la consecución de ingresos en este segmento, es que “la digitalización de trámites y documentos de los últimos años generó una caída en el número de envíos masivos tramitados en el país en el 2019, año en el que se tramitaron 51 millones de envíos menos respecto al 2018”.
Por su parte, los servicios postales de pago, que mostraron un alza de 3,03 % en su crecimiento entre 2018 y 2019, alcanzaron a cubrir los 32 departamentos el año pasado, con lo que se permitieron realizar 136,12 millones de giros.
Este negocio cerró 2019 con cinco operadores distribuidos en 35.129 puntos a lo largo del país. De estos, en términos de transacciones facilitadas fue Efecty el que dominó, con un total de 53,08 millones; seguida de Super Giros, con 42,94 millones; y Matrix Giros con 38,21 millones de procesos finalizados con éxito.
La porción de mayor relevancia en términos de cifras, es decir la referente a la mensajería expresa, concluyó 2019 con un total de 191 operadores, que operan en 6.398 puntos que los lleva a tener presencia en los 32 departamentos.
Así, se lograron concretar 279,86 millones de envíos masivos, de los cuales 60,1 % fueron de carácter local; 39,9 % de índole nacional; y solamente 0,02 % registrados como internacionales. En cambio, los envíos individuales se distribuyeron de la siguiente manera: 26,92 % locales; 70,55 % nacionales; y 2,53 % para fuera de este territorio.
Domina Entrega Total es la compañía de mayor importancia con aproximadamente 46.000 millones de pesos a partir de los envíos. A este, le siguieron Cadena Courier, que se estableció en 30.000 millones, y Servientrega, que llegó a 17.000 millones de pesos.
“Estos datos presentados en el reporte de industria entre de los servicios de telecomunicaciones y el sector postal, nos servirán para seguir avanzando hacia una economía digital favorable al país y un desarrollo sostenible del comercio electrónico, lo cual será importante para la recuperación de la economía en la era posterior a la covid-19”, concluyó el directivo de la CRC.
Retos de la industria
Con respecto a la división de giros, la cual solamente tiene cinco empresas autorizadas para realizar estas operaciones, se vivieron días difíciles al inicio de la pandemia, pues según lo detalla Juan Andrés Carreño, presidente de Asopostal, “mantuvimos abierta parte de la red, pero estuvimos abiertos cerca de 60 % y hasta el 30 de agosto logramos abrir el 100 % de los puntos del país”.
Este segmento fue catalogado como servicio público esencial por el Gobierno, destacó Carreño. Y cobró gran importancia en un contexto en el que las dificultades económicas primaron para los colombianos, con una caída del Producto Interno Bruto de 15,7 % y un desempleo que marcó máximos históricos en el segundo trimestre de este año.
De esta manera, por medio de estos giros se logró llevar a cabo la totalidad de pagos del programa Colombia Mayor, además de servir de apoyo también en las iniciativas de Jóvenes en Acción y Familias en Acción.
Además, puntualizó el presidente de Asopostal, “el sector de giros ha estado muy comprometido con los colombianos, que realmente han encontrado en este un aliado para ayudar a su familia y sus amigos en momentos difíciles”.
Pero no ha sido el único que ha visto un contexto difícil en esta época, puesto que Isaac Chaparro, gerente de innovación y Desarrollo de Inter Rapidísimo, afirmó que “cuando empezó la emergencia sanitaria el panorama era incierto y desalentador, pero sabíamos que debíamos reinventarnos”.
Así, Chaparro destacó que se desarrollaron nuevos servicios al término de 20 días, los cuales en otro contexto se hubieran demorado en concretarse más de un par de meses. “Creamos Giros en Casa, donde buscábamos entregar dinero en efectivo a domicilio y construimos el primer autoenvío de Colombia, en una iniciativa que buscaba eliminar las aglomeraciones en nuestros canales de venta”.
Previo a la pandemia, esta empresa tenía presupuestado un crecimiento cercano a 30 % para cierre de este año. Con este nuevo panorama y con las ideas que se propusieron, se movilizó 60 % más de lo que se esperaba.
De cara a la innovación, la empresa también destacó que entre sus proyectos se encuentra la implementación de drones en las entregas. Con esto, lo que se busca es que se optimicen en 40 % los tiempos de entrega en los lugares más recónditos de la geografía nacional.
La mejoría
Otro de los ejemplos es el de 4 - 72, firma oficial de servicios postales. Su presidente, Luis Humberto Jiménez Morera, destaca el tercer trimestre, es decir entre julio y septiembre, como el que recuperará el comercio electrónico entre fronteras y de esta manera servirá de impulsor para los envíos internacionales.
De hecho, la organización detalla que “en agosto de 2020, recibimos y distribuimos cerca de un millón de paquetes (ver gráfico), superando en más del 150% el promedio del volumen mensual de envíos movilizados durante el segundo trimestre de 2020”.
“Solo en los meses de julio y agosto, el Servicio Postal Nacional 4-72 recibió un volumen de envíos igual al movilizado el año pasado, para las temporadas de Black Friday y navidad”, aseveró Jiménez Morera sobre cómo con la reactivación se crece.
60,1 %
de los envíos masivos que se hicieron en 2019 fueron locales.
5
empresas están autorizadas en el país para llevar a cabo giros postales de dinero.