El Dane reportó que la pobreza monetaria para 2022 afectó al 33,6% de la población colombiana y la incidencia bajó con respecto al 39,7% registrado en 2021. Eso indica que 1.302.469 personas superaron esa condición en la que hay insuficiencia de ingresos para cubrir los costos básicos de vida.
De acuerdo con los cálculos de la entidad estadística, la línea de pobreza monetaria per cápita para el año pasado se ubicó en $396.864 y en $1.587.456 para un hogar de cuatro personas.
Según lo registros de 2021, en el país se contabilizaron 19.634.410 personas en esta situación, mientras que el año pasado la cifra bajó a 18.331.941 y la diferencia entre ambos periodos arroja a los 1,3 millones de habitantes que ya no están con déficit de ingresos para vivir.
Hay que resaltar que en el desagregado por dominios geográficos, Medellín fue la tercera ciudad en la que más se redujo la pobreza monetaria, dado que 168.319 paisas se sobrepusieron a esta condición adversa el año anterior. Solo Cali (-191.679) y Bogotá (182.376) tuvieron unas reducciones más representativas.
Entre las 23 ciudades y sus áreas metropolitanas, solo en Cartagena, Montería y Sincelejo hubo un aumento de la pobreza monetaria, siendo la capital de Bolívar en la que más se deterioró el indicador con 14.485 personas que adolecieron de las entradas suficientes para satisfacer sus necesidades primarias.
La pobreza extrema
Con respecto a línea de pobreza extrema, Piedad Urdinola, directora del Dane, recordó que este cálculo corresponde al valor de la canasta básica de alimentos, cuyos artículos deben garantizar las 2.100 calorías diarias.
Así las cosas, la funcionaria indicó que su incidencia se ubicó en 13,8% de la población colombiana y aumentó frente al reporte de 2022, que fue de 13,7%. La línea de pobreza extrema per cápita se fijó el año pasado en $198.698 y en el caso de un hogar de cuatro personas fue de $794.792.
Las cuentas indican que el año pasado hubo 6.904.501 personas en situación de pobreza extrema y este indicador desmejoró en el promedio nacional, esto teniendo en cuenta que 130.907 habitantes ingresaron a la estadística de aquellos que no pueden suplir su canasta básica.
Nuevamente, Medellín fue la tercera ciudad en la que más cayó el número de ciudadanos en esta condición y evidenció una reducción de 49.276, siendo esta una variación estadísticamente significativa con respecto a 2021. Por delante de la capital antioqueña se ubicaron Cali (-89.722) y Cúcuta (-55.117).
De acuerdo con el Dane, en nueve de las 23 ciudades aumentó el número de habitantes con insuficiencia extrema de ingresos, siendo Cartagena (+25.203) la urbe que lideró el escalafón de las que más vieron crecer su número de habitantes en esa situación.
Por otra parte, Urdinola también presentó la variación del coeficiente de Gini, utilizado para medir la desigualdad en los ingresos y mientras más cercano esté a 1 más grande es la brecha en las entradas monetarias de los habitantes. Para 2022, el coeficiente cayó a 0,556 desde el 0,563 registrado en 2021.
En este sentido, la directora afirmó que no es común ver grandes cambios en el Gini entre un año y otro, por lo que se requieren grandes esfuerzos permanentes en el tiempo en aras de reducir la diferencia.