En la madrugada de este jueves 15 de agosto, la Junta Directiva de ISA, filial de Ecopetrol, decidió nombrar como nuevo presidente de la empresa de interconexión eléctrica a Jorge Andrés Carrillo, una ficha clave del exalcalde Daniel Quintero.
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Tan es así, que de los primeros en salir a trinar sobre este nombramiento fue el mismo Quintero, quien le puso tres tareas al recién nombrado presidente de ISA. Entre ellas, “sacar a los uribistas que llevan dos años atornillados en el gobierno Nacional”, e “iniciar una auditoría forense para sacar la corrupción corporativa a patadas”. Lo que es, al menos, curioso, porque Carrillo está detrás de varios escándalos de corrupción en EPM.
Así fue la elección
Desde el año pasado el órgano directivo había empezado los trámites para elegir al sucesor de Juan Emilio Posada, quien salió del cargo en octubre.
EL COLOMBIANO conoció que la decisión se tomó finalmente en una extensa reunión de cerca de 10 horas y que culminó hacia la 1:30 de la mañana. En la junta había una puja interna entre un ala que quería a una persona con conocimiento técnico y otra que quería un movimiento político, aupada por los representantes del Gobierno. Esta última se impuso.
Desde que el proceso inició el nombre de Jorge Carrillo, exgerente de EPM, se oía por aquí y por allá. Se suponía que era una ficha prácticamente segura entre los finalistas, que era impulsada por el exalcalde Daniel Quintero, con fuertes nexos en el petrismo, al menos así se daba por descontado desde el año pasado. Incluso, varias fuentes contaron que aun cuando Carrillo estaba en EPM, estaba buscando a quienes lo acompañarían en ISA.
Este diario había anticipado que el nombre de Carrillo era apoyado por Petro, pero no por Ricardo Roa el presidente de Ecopetrol. Y que estaba en una lista inicial de 25 candidatos que se había depurado a unos cinco nombres, entre los que se destacan Mónica Contreras, hoy presidente de TGI, que es una empresa también del GEB; Sandra Fonseca, quien fue presidente del GEB durante la alcaldía de Gustavo Petro y hoy es la directora ejecutiva de Asoenergía; y Santiago Arcila Vásquez, gerente general de Trelec Guatemala (filial de EPM).
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El 24 de mayo pasado llegaron dos nombres fuertes a la Junta Directiva: Sandra Fonseca, quien fue apoyada por un ala de la junta que está en la búsqueda de un presidente que cumpla con una matriz técnica, y otra ala, que en palabras de algunos conocedores del tema, es “la que hace caso”, apoyando la postulación de Carrillo.
Más o menos las cosas estaban así: David Riaño, Lucía Díaz, Luis Ferney Moreno y Fabiola Leal son miembros en la junta nominados por Ecopetrol, por lo que podría decirse que tienen que rendirle cuentas al Gobierno, que en este momento apoya a Carrillo. Mientras que Juan Zárate, Germán Arce y Camilo Zea, nominados por los fondos de pensiones, están más interesados en un perfil técnico que guie los caminos de la empresa de la mejor manera.
Mientras que Carlos Raúl Yepes, único miembro de la junta nominado por EPM, se opuso a rajatabla a que Carrillo quedara a cargo de la empresa, según dicen, porque no quiere ahí a nadie que huela a Quintero, y menos Carrillo, dados los nefastos resultados que dejó en EPM.
Sin embargo, desde el quinterismo se seguía haciendo mucha fuerza a nivel del gobierno nacional para que Carrillo quedara elegido. Y, de otro lado, el mismo Carrillo fue prometiendo puestos, para congraciarse con sectores que pudieran tener algún efecto en la elección. Entre ellos dicen que se han concretado la entrega de la gerencia de Red de Energía del Perú a José David Acosta, y la gerencia en Brasil a Daniel Arango, exvicepresidente de Gestión de Negocios del Grupo EPM; aunque las propuestas han llegado a muchas más personas del sector, para lo que han sido relevantes personajes como Darío Amar, exvicepresidente de EPM, y el abogado Luis Botero.
De momento, el mercado sigue a la espera del anuncio oficial por parte de ISA, que deberá hacerse por el conducto regular de la información relevante ante la Superintendencia Financiera, al ser una compañía listada en bolsa.
La empresa que recibe
La transportadora de energía Interconexión Eléctrica (ISA) reportó ingresos por $7,11 billones en el primer semestre de este año, cifra menor a los $7,45 billones contabilizados en el mismo periodo del año anterior.
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La utilidad de la empresa cayó 12% al pasar de $1,52 billones entre enero y junio de 2023 a $1,34 billones en los mismos meses de este año.
“Un mensaje muy importante para el mercado es que los resultados son positivos; hemos venido superando en cada negocio y geografía las metas planteadas en la estrategia a 2030. Nuestros ingresos continúan creciendo en las monedas con las que se remuneran los activos en cada país, gracias a la entrada en operación de nuevos proyectos, entre otros factores. No obstante, la conversión de los estados financieros de nuestras filiales a pesos colombianos disminuye algunas de las cifras consolidadas”, explicó el vicepresidente encargado de Finanzas Corporativas de ISA, Jaime Falquez Ortiga.
Es de recordar, que desde la salida de Posada, la presidencia de ISA la ostenta bajo encargo Gabriel Jaime Melguizo Posada, quien vicepresidente de la Unidad de Negocios de Transmisión de Energía.
