El rol preponderante de ISA radica en que, a través de su filial Intercolombia, es el mayor transportador de energía en el país, con una red de 12.048 kilómetros de líneas de alto voltaje en operación y 102 subestaciones en funcionamiento.
Pero su alcance trasciende las fronteras, pues esta es una multilatina que opera en los negocios de energía eléctrica, vías y telecomunicaciones en Brasil, Chile, Perú, Bolivia, Argentina y Centroamérica, donde genera más de 4.000 empleos en 51 empresas.
Al frente de este gigante, de $73,4 billones en activos, está desde comienzos de este mes Jorge Andrés Carrillo Cardoso, cuyo nombre ni siquiera ha sido asentado en el certificado de existencia y representación legal de la Cámara de Comercio de Medellín.
En este documento, expedido el pasado viernes por la entidad, todavía figura como presidente de ISA Gabriel Jaime Melguizo Posada.
Parte del problema para inscribir el nombre de Carrillo en el certificado es que el acta de la reunión de junta directiva que sesionó entre el 14 y 15 de agosto, en la que fue elegido como presidente, no ha sido aprobada y sin ese visto bueno ese nombramiento no se puede asentar.
No obstante, en su último reporte a la Superfinanciera, ISA indicó a finales de agosto que Carrillo iniciaba “un proceso de inmersión” que le permitiría conocer a profundidad los negocios de la compañía y “el marco de actuación en el que se desempeña”.
A cuatro semanas del arribo de Carrillo a ISA, en los pasillos de la empresa todo es inquietud y expectativa sobre la cascada de cambios que se presume está en camino.
Entre los comentarios que se oyen acerca del poco control que Carrillo tiene de la compañía y el escaso nivel de ubicación figuran expresiones como “este señor no manda ni por pan, y todavía no sabe dónde queda el baño”.
El tablero
Debajo de la presidencia de ISA figura “un equipo único e inspirador, comprometido con el desarrollo de la región y la transformación global, la protección del medio ambiente y la innovación en los negocios”, integrado por 10 vicepresidentes.
Las inquietudes que surgen en este aspecto son si la actual composición del organigrama se mantendrá, o si por el contrario habrá cambios y si estos están en camino. Un termómetro de lo que podría ocurrir está en la Vicepresidencia de Finanzas Corporativas, posición que por estos días está en encargo y en cabeza del ingeniero industrial Jaime Falquez Ortiga.
¿Nombrarán en propiedad a Falquez? ¿Habrá un proceso serio de selección? ¿Se contratará una firma cazatalentos para proveer el cargo? ¿Será un nombramiento a dedo?
En el mundo empresarial y corporativo no es inusual que un presidente o gerente quiera rodearse de personal de confianza, máxime en una multilatina con negocios estratégicos en distintas geografías latinoamericanas.
Es así como durante la gestión de año y medio de Juan Emilio Posada en ISA (junio de 2022 a enero de 2024) se dieron dos cambios en vicepresidencias (Finanzas y Crecimiento y Desarrollo) y cuatro en direcciones (Innovación, Operaciones, Gestión Jurídica y Gobierno Corporativo).
En el actual contexto de la empresa, Carrillo estaría contemplando una gran movida. Este diario conoció versiones según las cuales a través de la Vicepresidencia de Talento Organizacional se estaría evaluando el costo de un paquete de retiro para ciertos cargos.
La lista de movidas incluiría a las vicepresidencias Jurídica, Estrategia Corporativa y Relaciones Institucionales, así como los representantes legales de las empresas de ISA en Perú (REP) y Brasil (CTEEP).
El valor de ese paquete de retiro sería de $42.000 millones, pues se trata de personas que llevan muchos años en la compañía con remuneraciones altas, cuyo eventual retiro resulta oneroso.
La iniciativa no ha sido llevada al seno de la junta directiva, pues aparentemente entre los miembros independientes que representan a los fondos de pensiones no habría ambiente para aprobarla, y los nominados por Ecopetrol, pese a ser mayoría, tendrían algún temor de lo que vaya a pasar en la petrolera, en la que se anticipa la próxima salida de su presidente, Ricardo Roa.
“Por fin cambiamos”
Las futuras movidas en ISA tienen pleno sustento al recoger las declaraciones del presidente Gustavo Petro durante su intervención el pasado viernes en la inauguración del parque solar fotovoltaico La Unión en Montería, Córdoba.
Al abogar por un cambio de regulación para que las empresas distribuidoras de energía vendan la electricidad más barata a los usuarios, el mandatario mencionó a XM (administrador del mercado eléctrico y filial de ISA), de la que dijo “ahora entró a controlar el ministro (de Minas y Energía, Andrés Camacho)”, y añadió: “Por fin pudimos cambiar al gerente de ISA, no querían que lo cambiáramos”.
Este diario intentó saber con XM cuál es nivel de control que el MinEnergía tiene de esa compañía o el alcance de la afirmación del presidente Petro. La respuesta fue: “XM debe ser independiente y autónoma, fundamental para el desarrollo de sus funciones”.
La declaración del mandatario sugiere para algunos que el Gobierno tiene en el radar la gerencia de XM, cargo que desempeña desde marzo de 2016, la ingeniera electricista María Nohemí Arboleda.
Conocedores del sector explicaron que bajo el paraguas de ISA está XM, que es la compañía que maneja la plata de todo el mercado eléctrico, por lo que un posible despilfarro o mal uso de esos recursos, que mensualmente suman unos $2 billones en solo garantías, terminaría agravando la compleja coyuntura de la cadena energética y llevando al país al terrenos de las penumbras.
La baraja
Así las cosas, queda claro que Carrillo tiene pleno respaldo de Petro y que cualquier decisión que tome tendrá su bendición.
Desde julio pasado EL COLOMBIANO publicó el artículo “Sin ganar la presidencia, Carrillo ya estaría repartiendo altos cargos de ISA”, en el que se enumeró una serie de nombres, que hasta ahora no han negado los ofrecimientos.
Como está dispuesto el ajedrez en este momento, todo apunta a que a REP en Perú vaya José David Acosta, mientras que los coqueteos a Daniel Arango y Santiago Arcila para que fueran a CTEEP, en Brasil, fueron declinados.
La permanencia de Falquez en la Vicepresidencia de Finanzas estaría llegando a su final, pues en su reemplazo se estaría pensando en Juan Felipe Salazar, quien en septiembre de 2021 fue nombrado asesor en Afinia.
La Vicepresidencia Jurídica sería asumida por Jonathan Villada, exvicepresidente de Asuntos Legales de EPM; la de Estrategia Corporativa estaría ofrecida a Darío Amar, y a Relaciones Institucionales, Fabio Andrés Marín. Estos dos últimos también pasaron por EPM cuando Carrillo estuvo al frente de ese grupo empresarial, durante la alcaldía de Daniel Quintero.
Mientras la presidencia de ISA mueve sus cartas, hay quienes estiman que en breve se conocerán los avances de procesos instaurados contra Carrillo ante la Fiscalía (16 especializada anticorrupción), por presuntas irregularidades en el nombramiento de Javier Lastra como gerente de Afinia, así como otros trámites en su contra sobre los que indaga la Procuraduría.
Desde mediados de agosto, cuando se conoció el nombramiento de Carrillo, el precio de la acción de ISA ha retrocedido 5,98% y a la espera de que reciba los coletazos de lo que ocurra con la especie de su controlante, Ecopetrol, en la bolsa de Nueva York. (ver Paréntesis)
¿Mirada desviada?
De momento, las angustias del sector eléctrico colombiano pasan hoy por los riesgos de un eventual apagón derivado del rápido descenso que observa el nivel de los embalses de generación (49,68 % al 26 de septiembre), así como por las alertas de una futura escasez de gas para abastecer las termoeléctricas.
A lo anterior se suma el reclamo de los usuarios por los altos costos del servicio, y las preocupaciones de las empresas distribuidoras y comercializadoras por el deterioro del recaudo y la liquidez, dado el atraso del Gobierno en el reconocimiento de los compromisos adquiridos.
No menos relevante resulta el hecho de que en tiempos en los que se pregona una “transición energética justa”, corresponderá a las grandes empresas encargarse del desarrollo de los proyectos de energías renovables no convencionales e infraestructura de transmisión, pero según advirtió la evaluadora de riesgos Moody’s todas ellas necesitarán emitir deuda para ese objetivo, con altos costos de intereses y riesgos de ejecución.
En este frente resalta como protagonista superestelar Interconexión Eléctrica (ISA), filial de Ecopetrol, empresa que en el primer semestre de este año contabilizó inversiones por $2,1 billones y tiene compromisos de aquí al año 2030 por $28 billones. Pero, ¿será posible que cumpla?