Desde que el ministro de Hacienda, Ricardo Bonilla, radicó en el Congreso de la República el proyecto de Presupuesto General de la Nación no han frenado las alertas que advierten sobre aumentos en los gastos de funcionamiento, bajones en la inversión, ahora Fedesarrollo advierte sobre la necesidad de un recorte.
Luis Fernando Mejía, director de Fedesarrollo, contó que se necesita un recorte del presupuesto de 2025, equivalente a $26,6 billones (1,5% de PIB), para asegurar el cumplimiento de la regla fiscal y evitar riesgos económicos, ya que una reforma tributaria traería mayor incertidumbre.
Hay que recordar que la idea del Ministerio de Hacienda es que el Congreso de la República apruebe un presupuesto de $523 billones, superior en 4,1% frente a los $502,6 billones que tuvieron luz verde para este año.
Fedesarrollo explicó que el Ministerio de Hacienda estima ingresos tributarios pro $316,5 billones, lo que significa que están $26,6 billones por encima del estimado por el propio Gobierno en el marco fiscal de mediano plazo, publicado el pasado 14 de junio.
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El centro de pensamiento económico indicó que para cumplir estas cifras se espera que crezcan los ingresos tributarios un 22,4% frente a la meta de 2024 ($258,6 billones), más de tres veces el crecimiento del PIB nominal, que se estima alrededor del 7,4% en 2025. Como porcentaje del PIB, los ingresos tributarios aumentarían de 16,3% del PIB a 17,8% del PIB, un incremento de 1,5 puntos porcentuales.
Algo nada fácil a raíz de la incertidumbre, de hecho Luis Fernando Mejía, indicó que “hay un riesgo alto de que estos ingresos adicionales no se materialicen, ya que $12 billones tendrían que provenir de una reforma tributaria que podría afectar aún más la recuperación económica, y los restantes $14,6 billones no parecen tener una fuente confiable”.
La economía colombiana solo creció 0,3% en el primer trimestre de este año y el documento alerta que una ley de financiamiento o reforma tributaria no es conveniente en una economía con bajo crecimiento, justamente en parte por los efectos de las reformas tributarias de 2021 y 2022 sobre los hogares y las empresas.
Además, “recaudar $14,6 billones adicionales por encima de lo estimado para el próximo año parece difícil, especialmente dado el comportamiento del recaudo en lo corrido del año”, se lee en el documento.
“El Gobierno nacional ha mostrado un importante compromiso con el cumplimiento de la regla fiscal, tomando decisiones difíciles como el aumento del precio de la gasolina y el reciente recorte en el presupuesto de 2024. Para continuar en la senda de consolidación de las finanzas públicas del país, es esencial que el monto del presupuesto para el próximo año sea ajustado a la baja,” concluyó el director de Fedesarrollo.
Otras dudas
Esa no ha sido la única crítica sobre el proyecto de presupuesto. Uno de los puntos que más despertó críticas fue la notable disminución en el componente de inversión, ya que se estima un recorte de 17,4%. Esto, al pasar de contar con un monto de $99,86 billones el año pasado a $82,46 billones para 2025, de los cuales unos $12 billones serían aportados con la Ley de Financiamiento, que no es otra cosa que una nueva reforma tributaria.
El documento precisa que se destinarán $112,60 billones para pagar deudas el año entrante, lo que es 19,12% superior frente a los recursos destinados al mismo fin este 2024.
No obstante, algo que llamó la atención fue el incremento de 6,1% en los gastos de funcionamiento. Ese dinero se destina a la contratación de funcionarios y el pago de sus salarios, servicios públicos, suministros, mantenimiento de infraestructuras y otros gastos operativos esenciales para mantener las instituciones gubernamentales.
La propuesta del Ejecutivo es que estos gastos escalen de $308,85 billones para este año a $327,93 billones para 2025. Eso representaría el 62,7% de todo el Presupuesto General, algo que no sorprende porque históricamente el funcionamiento abarca la mayor parte del dinero estatal.
Hay que tener en cuenta que este proyecto debe surtir su trámite por el Congreso para ser aprobado, por lo que presentaría algunos cambios, además que se espera un acalorado debate frente a la necesidad de la reforma tributaria propuesta por el Gobierno para lograr más impuestos.
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