EPS Sura, una de las principales entidades prestadoras de servicios de salud en Colombia, ha solicitado su retiro voluntario del sistema de salud. Esta decisión se suma a la solicitud de liquidación de Compensar y a la intervención de Sanitas por parte del Gobierno Nacional.
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Según Ana María Vesga, presidenta de la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi), la crisis financiera de EPS Sura se debe a varios factores, como la siniestralidad desbordada, es decir, la entidad ha enfrentado un alto número de reclamaciones y gastos médicos, lo que ha afectado su solvencia financiera.
También a las pérdidas acumuladas, que ya suman $221.000 millones. Así como la descapitalización por la falta de recursos suficientes para operar adecuadamente dentro del sistema de salud.
De hecho, en la rueda de prensa en la que EPS Sura anunció su petición de desmonte gradual, Juana Francisca Llano, presidenta de Suramericana, respondió que el gobierno podría intervenir a la EPS Sura por no cumplir con los requisitos de habilitación financiera.
Hay que recordar que la Contraloría realizó un análisis de la situación financiera de 26 EPS y encontró que, hasta octubre de 2023, estas entidades deben un total de $25 billones a hospitales y proveedores. Además, tienen otras deudas como reservas técnicas y pasivos administrativos.
El informe destaca que 16 de estas EPS (el 61,5%) no tienen un margen de solvencia satisfactorio y, lo más grave, no cumplen con los requisitos básicos para operar: capital mínimo, patrimonio adecuado y reservas técnicas. Solo 5 EPS (Salud Total, Sura, Comfachocó, Capresoca y EPM Salud) cumplen con la provisión y la inversión de sus reservas técnicas.
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Sin embargo, la preocupación por el futuro del sistema de salud aumenta, especialmente porque el Gobierno ya intervino a Sanitas y Nueva EPS, y no descarta intervenir otras EPS.
Por eso, Sura es la EPS no intervenida con mayor endeudamiento, con una deuda de $782.410 millones hasta octubre de 2023, lo que ha generado interés y expectativa sobre posibles acciones de la Superintendencia de Salud.
En su momento, el Grupo Sura argumentó que su situación financiera se debe a problemas como la insuficiencia de la Unidad de Pago por Capitación (UPC), la demora en los pagos del Gobierno y otras deudas.
La Superintendencia de Salud ha intervenido EPS debido a riesgos financieros que podrían afectar la prestación de servicios, por lo que es posible que se tomen medidas similares en el futuro. Por eso, una de las opciones del Gobierno Petro es liquidar a EPS Sura por no cumplir con los requisitos de habilitación financiera.
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Estos requisitos están establecidos para garantizar su solvencia y capacidad de operación. Y son: capital mínimo, es decir, las EPS deben contar con una cantidad mínima de capital para iniciar y continuar sus operaciones. También Patrimonio, que significa que sus activos deben ser suficientes para cubrir sus pasivos y garantizar la estabilidad financiera, y reservas técnicas, ya que son los fondos destinados a cubrir futuras obligaciones derivadas de la atención en salud de sus afiliados.
El último reporte de Sura
En una carta del 4 de marzo de 2024 dirigida a la Comisión Séptima de la Cámara de Representantes en respuesta a cuestionario dirigido a la EPS, Sura reveló que, hasta enero de 2024, enfrenta dificultades para cumplir con los indicadores de patrimonio adecuados, teniendo un déficit significativo en su patrimonio técnico.
“Asimismo, EPS Sura destaca la alta prevalencia de enfermedades de alto costo entre sus afiliados, exacerbada por traslados masivos de usuarios de EPS liquidadas, lo que ha aumentado la carga financiera y operativa”, se lee en la misiva.
La empresa detalló que su principal problema es su patrimonio técnico, que es el capital que se requiere para cubrir posibles riesgos financieros. A septiembre de 2023, el patrimonio técnico de la EPS era de -$144.300 millones, lo que significa que tiene un déficit de $163.900 millones.
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Este déficit es aún más preocupante si se tiene en cuenta que el patrimonio contable de la EPS a enero de 2024 era de solo $34.402 millones. “Este valor sigue siendo insuficiente para cumplir con el indicador de patrimonio adecuado necesario, lo que pone en riesgo la viabilidad financiera de la entidad”.
La EPS también mencionó que la situación financiera se ha visto agravada por dos factores principales: traslados masivos de afiliados, ya que desde 2019 hasta 2022, la EPS recibió más de 540.000 afiliados provenientes de EPS liquidadas. Muchos de estos afiliados tienen enfermedades preexistentes o de alto costo, lo que ha aumentado significativamente los gastos de la EPS. Y la alta prevalencia de enfermedades costosas, como el cáncer.
“Esto se debe a que la EPS tiene una gran concentración de afiliados en zonas de alta pobreza y con acceso limitado a servicios de salud preventiva”.
En el documento también se detallan las reservas técnicas de EPS Sura, que son las que respaldan sus obligaciones con los afiliados, como el pago de incapacidades y atenciones médicas. A diciembre de 2023, las reservas técnicas de la EPS ascendían a $1.650.521 millones. Sin embargo, los activos que respaldan estas reservas solo eran de $1.709.773 millones a enero de 2024. Esto significa que la cobertura de las reservas era del 103,59% sin alivios y del 138,15% con alivios.
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La razón de la crisis
Acemi también reconoció que la principal causa de esta crisis está relacionada con la insuficiencia de la prima reconocida por la Nación. A pesar de las advertencias realizadas por EPS Sura, Sanitas y Compensar al Gobierno Nacional sobre su situación financiera, no se tomaron acciones concretas para corregir el rumbo. “El ajuste de la Unidad de Pago por Capitación (UPC) impuso mayores cargas a las EPS y destinó recursos a fines distintos a la atención en salud de la población”, dijo el gremio.
Este retiro voluntario representa un desafío significativo para el sistema de salud colombiano, ya que afecta 5,3 millones de afiliados. La situación es preocupante, y la presidenta de Acemi advierte que “estamos presenciando la destrucción del mayor avance social del país en toda su historia”.
En términos generales, las deudas acumuladas por EPS Sura, Sanitas y Compensar suman un total de $1,6 billones.
Estas ven números rojos en sus balances financieros por deudas que tiene el Estado con las EPS, lo que se suma a pérdidas generales del sistema, las nóminas, entre otros puntos que según dicen, los tiene “en una situación que hoy hace que sea insostenible y que amerita una solución inmediata”, recalcó Acemi.
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