Pico y Placa Medellín

viernes

0 y 6 

0 y 6

Pico y Placa Medellín

jueves

1 y 7 

1 y 7

Pico y Placa Medellín

miercoles

5 y 9 

5 y 9

Pico y Placa Medellín

martes

2 y 8  

2 y 8

Pico y Placa Medellín

domingo

no

no

Pico y Placa Medellín

sabado

no

no

Pico y Placa Medellín

lunes

3 y 4  

3 y 4

language COL arrow_drop_down

Don Álvaro Uribe Moreno, empresario que dejó huella en Antioquia

A sus 75 años falleció el presidente del Grupo Agenciauto, quien aportó desinteresadamente al desarrollo de la salud, la educación y el comercio.

  • Álvaro Uribe Moreno gestó la expansión de Agenciauto, negocio que heredó de su padre. FOTO Cortesía Fenalco Antioquia
    Álvaro Uribe Moreno gestó la expansión de Agenciauto, negocio que heredó de su padre. FOTO Cortesía Fenalco Antioquia
11 de enero de 2017
bookmark

No en vano nació Álvaro Uribe Moreno en un taxi la noche del 6 de octubre de 1941 en una calle de Medellín. Por ese inusual alumbramiento, luego reconocería que su existencia estaba “predestinada” a los automóviles.

Y lo cumplió. A sus 23 años, más por obligación –murió su padre–, que por gusto –se quería ir a París a estudiar filosofía–, se puso al frente de Agenciauto y convirtió sus vitrinas en uno de los conglomerados de concesionarios más importantes del país y emplea a cerca de 1.200 personas.

Estando joven, “recibí una lección: la vida no es como una carrilera hasta la llegada, lo importante es adaptarse a los cambios”, comentó don Álvaro en un video reciente, a propósito de la distinción “A toda una vida” que le entregó Fenalco Antioquia, gremio de comerciantes, en octubre de 2015.

Ese abogado egresado de la Universidad de Antioquia pasó de vender el 26 de agosto de 1970 el primer Renault 4 ensamblado en Colombia en un concesionario de la carrera Palacé, como el primer concesionario autorizado de Sofasa, a diversificar el negocio con una visión empresarial y de comerciante experto. Enfrentó crisis, aprovechó bonanzas, pero, dicen quienes trabajaron con él, siempre antepuso a las ganancias a que se generara empleo.

Por don Álvaro y su gestión estratégica, hoy el conglomerado familiar pone a rodar marcas como Renault (Agenciauto), Toyota (Autoamérica) y Volkswagen (Automotora).

“Recuerdo que me decía que era un desvelado por la capacitación de los comerciantes y por eso buscó que Fenalco fuera un gran centro de capacitación e inspiró esa línea de servicios que es Fenicia”, comentó a ayer a este diario Sergio Ignacio Soto, director de Fenalco Antioquia.

Pero su vocación empresarial y la experiencia recogida también la compartió como miembro activo del gremio y en juntas directivas como las de la Cámara de Comercio de Medellín, el Banco Comercial Antioqueño, Cadenalco (hoy Éxito), Inversiones Mundial (hoy Grupo Orbis), Pintuco y Empresas Públicas de Medellín (EPM). También fue cofundador del periódico El Mundo y participó en la creación de Avícola Nacional (Avinal) en la década de los setenta.

Servicio social obligatorio

Pero la vida de don Álvaro no estaba completa solo con sus éxitos en los negocios.

Al tiempo que aprendió a devorar libros, hasta de filosofía y teología, también se entregó sin contribución alguna a acompañar durante 40 años el progreso del Hospital Pablo Tobón Uribe desde su junta directiva.

“Era un hombre muy comprometido, siempre presente, de una enorme sensibilidad social y una gran capacidad de análisis para ayudar al hospital a que cumpliera su labor”, comentó su director, Andrés Aguirre.

Pero su otra apuesta de sentido vital estuvo en la educación. Hasta noviembre pasado fue presidente del Consejo Superior de Eafit y desde esa instancia, durante más de 40 años, acompañó el posicionamiento de la universidad, donde incluso fue profesor por un par de años.

“La universidad está hoy huérfana”, afirmó su rector Juan Luis Mejía, quien reconoció en Uribe Moreno un jefe extraordinario, oportuno para dar consejo, para tomar la decisión acertada y reflexiva.

“Era sobrio en el decir y en el hacer. Siempre puso al ser humano como objetivo de todas las acciones. Estoico en las adversidades, gran empresario y ante todo un ciudadano a carta cabal y un padre de familia ejemplar”, comentó a este diario Mejía.

En noviembre de 2015, don Álvaro respondió al diario El Tiempo, cuando ya enfrentaba una enfermedad terminal, que moriría tranquilo y con alegría. Su consejo para los nacientes empresarios fue: “Que sigan sueños, que sean consecuentes con lo que sueñan (...) no salgan corriendo ante la primera dificultad”.

Con su profundo respeto por los demás, su pasión por los libros y con la conciencia del deber cumplido, en la tarde de ayer falleció este líder empresarial. Hoy serán sus exequias a las tres de la tarde en la parroquia de La Visitación, en El Poblado.

52
años atrás, don Álvaro Uribe Moreno asumió el liderazgo del hoy Grupo Agenciauto.
El empleo que buscas
está a un clic

Nuestros portales

Club intelecto

Club intelecto
Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD