Esta semana la autoridad aeronáutica analizará la solicitud de la aerolínea.
La Aeronáutica Civil Colombiana (Aerocivil) recibió la solicitud de la aerolínea Emirates Airlines (Emirates) para la prestación del servicio regular de transporte de pasajeros entre las ciudades de Dubái (Emirato Árabes Unidos) y Bogotá, con una parada intermedia en la ciudad de Miami (Estados Unidos).
“La solicitud contempla el inicio de operaciones regulares diarias de pasajeros entre Dubái y Bogotá, a través de Miami, desde el próximo 3 de junio de 2024. Los vuelos serían operados por aviones Boeing 777-300ER de 354 pasajeros en una configuración de tres clases, y una capacidad de carga de 14 toneladas en cada vuelo”, precisó la Aerocivil en un comunicado.
De acuerdo con el estudio de la aerolínea presentado a la Aerocivil, Colombia representa una demanda significativa y creciente de viajes aéreos desde y hacia los Emiratos Árabes Unidos, aunque no se precisó el volumen de los viajeros.
“El Gobierno celebra la confianza de la industria aérea internacional en el turismo, el intercambio cultural y en la apertura de nuevos mercados que permitirán la generación de oportunidades de crecimiento para el país y la oportunidad para afianzar la cercanía con el mundo árabe”, se lee en el comunicado.
Igualmente, se indicó que la solicitud de la aerolínea Emirates Airlines será analizada por la Aeronáutica Civil en audiencia pública el próximo viernes, 16 de febrero.
Vale mencionar que en diciembre pasado y luego de dos años, Colombia y Emiratos Árabes Unidos cerraron las negociaciones para un Acuerdo Integral de Asociación Económica (CEPA por sus siglas en inglés), que “establece un acuerdo comprehensivo y de beneficio mutuo que cumple con las ambiciones económicas de ambas naciones, y que además tiene como cláusula fundamental la protección del medioambiente”.
En ese momento, el Ministerio de Comercio dijo que el objetivo de este acuerdo era aprovechar las oportunidades comerciales en bienes y servicios entre ambos países, que son economías complementarias y que en ningún caso afectaría los asuntos ambientales ni de la biodiversidad.
Se trató del primer acuerdo que Colombia tiene con un país del Medio Oriente, región en la cual los productos colombianos cuentan con una demanda importante y oportunidades en sectores como agricultura, servicios de tecnología y software, entre otros.
El Acuerdo, cuya negociación se cerró durante la Conferencia de las Partes en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP28), incluyó disciplinas tradicionales como acceso a mercados de bienes y servicios; defensa comercial; solución de diferencias; obstáculos técnicos al comercio; medidas sanitarias y fitosanitarias; reglas de origen; facilitación de comercio y procedimientos aduaneros y asuntos legales e institucionales.
