Entre enero y junio de 2016, la filial de la italiana Enel en Colombia, Emgesa, logró utilidades por 435.201 millones de pesos, es decir un 1,5 % más que lo reportado en igual periodo de 2015.
La compañía, que cuenta con 11 centrales hidroeléctricas y dos termoeléctricas en el país, logró ingresos operacionales por 1,96 billones de pesos, es decir, 49 % más que el año pasado.
Este comportamiento se explicó, principalmente por el incremento en los contratos de energía, que crecieron 11,9 % en el mercado no regulado (industria) y los mayores precios que se registraron como consecuencia del fenómeno de El Niño.
Las cifras de Emgesa mostraron que, al primer semestre de 2016, las centrales de la empresa generaron el 22,1 % del total de la energía del sistema nacional y alcanzó los 32.481 gigavatios hora /día.
El flujo de caja no se vio afectado por la fuerte sequía del inicio del año y el Ebitda creció 30 % a junio y cerró el semestre en 1,06 billones de pesos.
Para el director general de Enel en Colombia, Lucio Rubio, la compañía presentó “excelentes resultados que permitieron dar una respuesta positiva al país en medio de la crisis energética. Suministramos más del 22 % de la energía consumida en el país, esto demuestra el buen desempeño operativo”.
No obstante, a mitad de año la deuda financiera de Emgesa también creció y llegó hasta los 3,99 billones de pesos, un 9,54 % más frente a lo reportado en 2015.
En un comunicado de prensa la compañía explicó que este incremento fue el resultado de un mayor apalancamiento internacional para soportar las inversiones remanentes de la hidroeléctrica El Quimbo en Huila.
Justamente, del total de capital invertido por la compañía en el semestre, unos 64.400 millones de pesos, el 29,5 % correspondió a subsanar costos del cierre de dicha central.