El presidente Gustavo Petro reavivó la polémica energética en Colombia al solicitar que Ecopetrol venda sus activos en el Permian, EE. UU., donde opera junto a Occidental Petroleum (OXY).
Esta cuenca, una de las más productivas del mundo, representa el 13% de la producción total de la petrolera, con más de 103.000 barriles diarios. La decisión ha generado una ola de críticas, ya que el fracking en el Permian ha sido clave para sostener la producción de Ecopetrol en medio de una caída de utilidades y ventas.
Siga leyendo: Petro pide a Ecopetrol vender su operación de fracking en Estados Unidos
¿Puede Ecopetrol deshacerse del Permian tan fácilmente?
Felipe Campos, gerente de inversión y estrategia en Alianza Valores y Fiduciaria, duda de la viabilidad de la venta.
“Ni idea si puedan salirse tan fácilmente de lo del Permian. Lo que sí sabemos es que, de un potencial de producción de 826.000 barriles diarios con los dos negocios de fracking en EE. UU., ya estamos en 750.000 y bajaríamos automáticamente a 660.000 si vendemos el que nos queda”.
Por su parte, el exministro de Hacienda, Juan Carlos Echeverry, fue más tajante: “¿Acaso Petro es dueño de Ecopetrol? El dueño es el Estado, que representa a 52 millones de personas, no a una sola. El activo del Permian es el más productivo de Ecopetrol. Ha evitado que la producción de la compañía caiga y dentro de las pésimas decisiones de este Gobierno, esta tendría un lugar superlativo”.
Lo paradójico es que, apenas el 3 de febrero, Ecopetrol había anunciado la extensión de su alianza con OXY en el Permian, con planes de invertir US$880 millones para perforar 91 pozos entre 2025 y 2026.
Además, la petrolera dejó abierta la puerta a extender aún más la operación según las condiciones de mercado.
Incluso, la Unión Sindical Obrera (USO), el sindicato petrolero, salió al paso a rechazar declaraciones del presidente Gustavo Petro y advirtió que la inversión de Ecopetrol en la cuenca del Permian para la exploración mediante Fracking se inició en 2019, y que de sustraerse de continuar en ese negocio podría generar consecuencias negativas tanto para la empresa como para el país.
“Perderíamos 4.200 millones de dólares que se han invertido y se extraerían 100 mil barriles al día menos de las cuentas de Ecopetrol, que equivalen al 13% de la producción total”, afirmó la USO.
Además, el sindicato alertó que vender en estos momentos impactaría negativamente el valor de la empresa porque pierde reservas e ingresos.
Lea aquí: “Sin la inversión y reactivación, el futuro de Ecopetrol está en riesgo”: advertencia de la USO
El sindicato también enfatizó en la necesidad de explorar en el país para garantizar la autosuficiencia y financiar la transición Energética. “Era obligatorio prorrogar el contrato para garantizar el retorno de la inversión y el valor en la acción de Ecopetrol”.
Golpe a las finanzas de Ecopetrol
La posible salida del Permian llega en un momento delicado para Ecopetrol. La empresa registró en el tercer trimestre de 2024 una caída en ventas del 1,5% y una contracción del 14,7% en su utilidad neta, pasando de $5,9 billones a $5,1 billones. Las ganancias para los accionistas también cayeron 28,3%.
Estos números reflejan un problema de fondo: el fracking ha sido el salvavidas de Ecopetrol en los últimos años.
Por ejemplo, en el segundo trimestre de 2024, la producción diaria de la compañía alcanzó los 758.000 barriles, de los cuales el 13% provino del Permian, registrando un crecimiento del 67% en esa región. Sin ese aporte, la producción de Ecopetrol habría caído drásticamente.
Este no es el primer golpe del presidente a la estrategia internacional de Ecopetrol. Hace solo unos meses, Petro vetó el proyecto Oslo, una adquisición clave con la que la petrolera buscaba comprar el 30% de CrownRock, una compañía de OXY, por US$3.600 millones.
Esta operación habría aumentado la producción de Ecopetrol en un 15%, fortaleciendo sus reservas y mejorando su rentabilidad.
El veto generó malestar en la industria y llevó a Vicki Hollub, CEO de OXY, a romper el silencio: “Trabajamos en ese acuerdo desde marzo hasta la semana pasada y pensábamos que estaba listo, pero el presidente Petro no lo aprobó. Ha dejado claro al mundo que es antipetróleo, antigas, antifracking y anti-Estados Unidos”.
Le puede interesar: Ecopetrol les pagará menos plata a sus accionistas en el 2025: estas son las razones
La incertidumbre sobre el futuro del fracking en Ecopetrol ha puesto en alerta a inversionistas y analistas. La decisión de Petro de abandonar el Permian no solo impacta las finanzas de la compañía, sino que también envía un mensaje claro sobre su política energética.
