No solo en Venezuela se ha sufrido el deterioro económico a raíz de la cuestionada revolución chavista. Una voraz hiperinflación y una fuerte contracción económica llevó a desatar un problema social, a tal punto que millones de personas optaron por abandonar el vecino país para buscar nuevas oportunidades en otras naciones.
Según la Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur), si bien hay venezolanos que han retornado a su país, persiste la salida de refugiados y migrantes a países vecinos y al resto del mundo. De hecho, de acuerdo con datos proporcionados por los gobiernos, la cifra ya superó los 7,7 millones a nivel mundial. Por tanto, un número considerable de personas requiere protección internacional y asistencia humanitaria.
Colombia es una de las naciones que ha presenciado en mayor medida esa realidad. De hecho, según cifras de la Acnur y de Statista, este país alberga un mayor número de migrantes venezolanos: 2,9 millones, lo que significa que acoge al 28,5% de todos esos migrantes en el mundo a corte de 2023.
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Perú es el segundo en la lista con 1,54 millones migrantes venezolanos. Luego sigue Estados Unidos, que alberga 545.200 personas del vecino país; el tercer destino es Brasil con 510.499; más abajo está España, que acoge 438.380 a corte del año pasado.
La Organización Internacional para las Migraciones (OIM por sus siglas en inglés) expresó que los países y las comunidades se comprometieron en ayudar a las personas de Venezuela y les han dado una generosa acogida, sin embargo, la presión para ellos incrementa. “Algunos países están implementando procesos de regularización a gran escala para garantizar la documentación y el acceso a derechos y servicios de las personas refugiadas y migrantes. Sin embargo, el éxito de estos esfuerzos y gestos de solidaridad requiere apoyo financiero, con el que también es posible garantizar que no se deje a nadie atrás”.
El impacto
La OIM destacó que los migrantes y refugiados venezolanos en Colombia generaron un impacto económico en ese país equivalente a 529,1 millones de dólares en 2022. El organismo internacional destacó que la cifra revela la contribución económica que los migrantes y refugiados hacen en toda América Latina y el Caribe.
“La migración funciona como un agente impulsor del desarrollo y estos estudios brindan evidencia empírica que fundamenta tal aseveración y demuestran de qué manera la migración puede promover el crecimiento de la fuerza social y económica en los países de acogida”, indicó Diego Beltrán, enviado especial de la OIM para la respuesta regional a los flujos de migrantes y refugiados venezolanos.
El Estudio de Impacto Fiscal de la Migración Venezolana en Colombia: Realidad versus Potencial anota que el impacto fiscal en 2022 representó casi un 2% del total de ingresos fiscales totales en ese país y se proyecta un potencial aumento que alcanzará la cifra de 804,3 millones de dólares con la total regularización de venezolanos en 2023.
Asimismo se hicieron estudios en Aruba, Costa Rica, Chile, República Dominicana y Perú. En el caso de Panamá, los emprendedores venezolanos han invertido más de 1.800 millones de dólares en la última década, creando unos 40.000 puestos de trabajo y cerca de 70% fueron ocupados por panameños.
Algo por mejorar es que los migrantes jóvenes encuentran dificultades al momento de buscar empleo, y que, en el caso de las mujeres, las tasas de empleo son más bajas en comparación con los hombre.
Por otro lado, la OIM sostuvo que “a pesar de los esfuerzos por parte de los actores para el desarrollo y de las organizaciones financieras para mejorar las perspectivas de empleo y los servicios públicos para migrantes y refugiados, las dificultades para validar sus cualificaciones profesionales más las eventuales situaciones de discriminación y xenofobia impiden su integración socioeconómica”.
Hay que recordar que este domingo 28 de julio se adelantarán las elecciones en el vecino país, donde hay una alta expectativa de que la oposición de María Corina Machado y Edmundo González desatornille del poder a Nicolás Maduro.
El organismo de las Naciones Unidas proyecta que el Producto Interno Bruto (PIB) de Venezuela crecerá un 4% este año. Y aunque, la variación de precios sigue siendo muy alta, se ha venido controlando, en 2023 se ubicó en 193%, según datos del Observatorio Venezolano de Finanzas.
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