Cada vez más personas optan por adquirir ropa de segunda mano, no solo por el ahorro económico, sino también por su impacto positivo en el medioambiente.
Comprar ropa de segunda mano se está volviendo una tendencia clave entre quienes buscan ahorrar y, al mismo tiempo, cuidar el planeta.
De acuerdo con un informe reciente de ThredUp, el mercado mundial de ropa usada creció un impresionante 18% en 2023, alcanzando los 197.000 millones de dólares.
En Colombia, el impacto no ha sido menor. Según cifras de GoTrendier, una popular plataforma de compra y venta de ropa de segunda mano, los colombianos lograron ahorros de hasta el 50% en comparación con la compra de ropa nueva, lo que equivale a $39.748 millones en 2023.
Este ahorro, además de beneficiar el bolsillo, fomenta un consumo más consciente y responsable.
La ropa de segunda mano ofrece más que solo ahorro. También permite a los compradores acceder a prendas únicas, incluyendo piezas vintage, ropa de lujo y diseñadores reconocidos, a una fracción de su precio original.
“En comparación a la ropa nueva, la ropa usada suele tener precios considerablemente más bajos, ya que se pueden encontrar prendas que se adaptan a todos los presupuestos y hasta descuentos del 80%, siendo una práctica que no solo ayuda al bolsillo, sino que también fomenta el consumo consciente y responsable”, se lee en el reporte de GoTrendier.
En Colombia, las marcas más demandadas en este sector incluyen Zara, H&M, Studio F y Stradivarius, todas disponibles a precios mucho más bajos que en tiendas convencionales.
Además, esta tendencia tiene un impacto ambiental significativo. La moda rápida, o fast fashion, se ha convertido en una de las principales fuentes de contaminación mundial.
Al optar por ropa de segunda mano, se reduce la demanda de nuevas prendas y, por ende, el desperdicio textil. “La moda rápida o fast fashion conocida por su alta rotación y producción masiva, es una de las principales fuentes de contaminación y desperdicio en el mundo, Por lo que, al reducir la demanda de nuevas prensas por medio de la circularidad estamos contribuyendo a contrastar los efectos de la moda y el desperdicio textil”, comentó Ana Jiménez, Country Manager de GoTrendier.
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