El mercado de las billeteras digitales se está expandiendo a gran velocidad en Colombia y duplica al promedio de América Latina. Según Grupo Credicorp, mientras en el país 61% de las personas cuenta con un producto de esta clase, en la región la proporción es 31%. Y ahora se encima otro jugador, pues Banco Agrario lanzó Bico, su apuesta para competirle a Nequi o Daviplata.
La entidad aseguró a EL COLOMBIANO que Bico se pensó desde hace diez años, pero solo hasta ahora se pudo materializar, y básicamente corresponde a un depósito de bajo monto digital que permite administrar el dinero por medio de bolsillos.
Así mismo, se pueden “realizar operaciones monetarias como cargar la billetera, hacer pagos de dinero a otros clientes Bico y retiros sin tarjeta desde los cajeros del banco, y no monetarias, entre ellas: consultas, extractos y modificaciones al perfil de cliente Bico, con tope máximo mensual de $9 millones, sin necesidad de tener una cuenta bancaria o tarjeta débito”.
Sobre la aspiración en cuanto a participación de mercado, dijo, “nuestro propósito es ser parte de las primeras billeteras digitales del país en el mediano plazo, gracias a nuevos servicios y actualizaciones para los usuarios”, y en ese sentido develó que toda persona mayor de edad, con acceso a internet y con sistemas operativos iOS, Android o Huawei pueden acceder.
¿Quién es quién?
Así las cosas, el mercado se pone cada vez más interesante. Nequi, por ejemplo, ya alcanza los 17,5 millones de usuarios y se consolida en el primer lugar entre las billeteras, mientras que Daviplata le sigue muy de cerca con 16,8 millones, según los registros más recientes.
A su turno, Movii alcanza los 4 millones de clientes, y dale!, del Grupo Aval, está creciendo a un fuerte ritmo y ya llega a 1,6 millones. Además, a la par de Banco Agrario, recientemente Google lanzó su billetera en el mercado colombiano para hacerle frente a Apple Pay, que llegó a finales de 2021.
¿Pero cómo se traduce esto en el día a día de los colombianos? De acuerdo con el Banco de la República, la tenencia de monederos digitales ha llegado a ser tan generalizada como la de cuentas de ahorro tradicionales, y es mayor que la de tarjetas débito.
“Se destaca que la tenencia de productos financieros, incluyendo los digitales, es considerablemente más amplia en las grandes aglomeraciones urbanas que en los municipios intermedios y en las áreas rurales”, explicó en un informe el banco central, y así mismo valoró que los depósitos de bajo monto son más generalizados en los hogares de bajos ingresos que las cuentas de ahorro, lo que los convierte en un importante instrumento de inclusión financiera.
En tanto, la Banca de las Oportunidades explicó que si bien más del 60% de los adultos colombianos cuenta con al menos un depósito de bajo monto, solamente el 48,2% lo tiene activo, razón que lleva a pensar en que el reto no es solo permitir acceso a estos productos sino también incentivar su uso.
Adicional, describió el Banrep, pese a la digitalización, “el efectivo continúa siendo el instrumento más utilizado por los colombianos para sus pagos habituales, en especial, en las zonas rurales y en los hogares de bajos ingresos”, con una influencia de entre 62% y 83%.