Hasta antes de la pandemia, en panaderías de Medellín era recurrente la promoción del lleve 7 x $2.000, haciendo referencia a algunos tipos de horneados como panes de trigo o sus variaciones de leche, mantequilla o maíz, y, cómo no, de fritos como los buñuelos.
Entonces, cuando el comprador preguntaba el valor de cada unidad, el panadero le respondía que un pan o buñuelo valía $300, y de inmediato le presentaba la oferta de 7 x $2.000, con lo que la unidad bajaba automáticamente a $285.
Hoy, ese “gangazo” no es posible tenerlo en la cartelera de precios, pues en los dos últimos años el valor de las materias primas se ha duplicado, y el impuesto al consumo del 8% que estuvo suspendido durante la pandemia volvió a cobrarse.
La periodista Vicky Dávila, directora de Semana, puso el dedo en la llaga al mostrar un pan de Tostao, que supuestamente en el pasado costó $100, ahora está a $5.500. En redes sociales las opiniones han dado para todo, hay quienes dicen que ese pan, tipo croissant nunca costó tan poco y otros se quejan del incremento en los precios que han visto en los últimos meses.
Y es que solo en el último año, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) o inflación del pan medido por el Dane muestra una variación del 25,41%, casi dos veces el promedio total anualizado que a abril fue de 12,82%.
Este comportamiento está impulsado por la variación que observan los ingredientes claves del proceso de elaboración como el trigo (32,74%), huevos (16,49%) o mantequilla (30,38%).
Desde la presidencia de la Asociación Nacional de Fabricantes de Pan (Adepan), Marcela Morales, explicó que un bulto de harina que en octubre de 2021 costaba $95.000 hoy vale $190.000.
“Los panaderos han bajado sus márgenes de ganancia, y han tratado de maniobrar de muchas maneras para mantener la oferta de pan corriente en el precio mínimo posible, pero en Colombia ya no se consigue pan de $200 o $300, el más barato debe estar en $500”, explicó la dirigente gremial, quien añadió que en este sector aún es alta la informalidad por lo que para los formales es complejo competir. “Hay quienes evaden responsabilidad con la autoridad tributaria y con sus empleados, y puede que sobrevivan algún tiempo corto, porque la sostenibilidad del negocio está en ser legal y cumplir todas las obligaciones”.
En negocios que intentan seguir atrayendo a los clientes con promociones se ve por estos días el lleve 7 x $4.000, es decir que la pieza que individualmente valdría $600 al llevarla en el paquete rebaja a $571.
Pero, este alimento podría estar en camino de encarecerse más. Pues se recuerda que en la discusión de la reforma tributaria del año pasado se intentó aplicarle el impuesto saludable, pero fue excluido. De haber pasado esa iniciativa, el pan tendría un 10% adicional en noviembre de este año, porcentaje que subiría a 15% en 2024 y al 20% en 2025.
Los que no se salvaron de ese impuesto fueron los productos de panadería con azúcar y chocolate, y estos sí serán más caros y afectarán los negocios que tengan en su portafolio tortas, galletas o postres.
“Van a estar gravados negocios que vendan más de $434 millones al año, que son muchos”, declaró Morales.
Y es que el consumo de pan en Colombia es relativamente bajo, está alrededor de 24 kilos por persona al año, pero en Chile la cifra alcanza los 96 kilos.
¿Y por qué los productos de las grandes panaderías industriales vienen con sellos alertando de altos contenidos de sodio y otros, y los que se venden en las panaderías de barrio no? “Eso ya está pasando. La panadería que elabore pan para la venta directa o consumo inmediato no tiene que llevar sellos, pero si lo empaca debe ponerle sellos”, respondió la presidenta de Adepan, que aglutina a unas 7.000 panaderías tradicionales en diversas regiones.
En el país hay unas 24.000 panaderías, 85% negocios de barrio (20.400), que son tradicionales o emprendimientos familiares que generan unos 400.000 empleos directos.
En un amplio espectro de panes, el preferido en el país es el pan blanco blandito, aunque los de la costa Caribe son más aliñados, pero en marzo el pandebono fue el mejor tercer plato de América, ganándole a los tacos y al churrasco en un listado que entregó el portal Taste Atlas.
“Esta es otra categoría que está en las panaderías, y ha sufrido mucho por la escasez de almidón y por los altos niveles de precios del queso”, resaltó Morales, quien enfatizó que panes de $100 o $200 no se volverán a ver “ni bajando el gramaje y hoy es necesario monetizar de otra manera ese alimento”.
A la actual tasa de cambio del dólar ($4.490,58) el precio de un pan en Colombia equivale a 11 centavos de dólar. En Miami, Estados Unidos, el precio está entre 30 y 50 centavos de dólar y en Brasil unos 15 centavos de dólar.