Pompones, crisantemos y hortensias son las variedades que más se despachan todas las noches desde el Aeropuerto José María Córdova, de Rionegro, hacia destinos internacionales, principalmente Estados Unidos.
Estas flores en su mayoría provienen de fincas floricultoras del Oriente antioqueño, donde cada uno de los tallos cultivados pasan a ser empacados y almacenados en cavas con temperaturas que oscilan entre los dos y ocho grados centígrados, y posteriormente a ser despachados en camiones hacia el aeropuerto.
La promesa es que, luego de salir del cultivo, en aproximadamente tres días, estas deben llegar a los supermercados de los países que las importan, donde deben durar, al menos, 10 días en los floreros.
¿Aire o mar?
Después del oro, las flores son el mayor producto de exportación de Antioquia, siendo la vía aérea su principal medio de transporte hacia el exterior (92%), seguido de la marítima (8%).
Catalina Pérez, gerente regional de ventas de Avianca Cargo para Colombia y Ecuador, comentó que semanalmente sus aviones transportan más de 600 toneladas de flores antioqueñas desde el aeropuerto de Rionegro.
“En lo que va del año hemos transportado 80.000 toneladas de flores desde Antioquia hacia otros destinos, principalmente Miami. El 33% de lo que exportamos a nivel nacional sale desde Rionegro”, anotó.
Sin embargo, uno de los desafíos que enfrenta diariamente el sector tiene que ver con el acceso a una continua y adecuada cadena de frío y a condiciones óptimas de transporte, pues de esto depende la prolongación de la vida útil de las flores.
Y sin bien los aviones han sido los mejores aliados para las exportaciones del sector, los costos logísticos son más altos.
José Manuel Henao, director comercial de Capiro, la mayor productora y exportadora de flores de Antioquia, explicó que, por ejemplo, exportar flores vía aérea a un país como Australia tiene un costo, promedio, de más de 6 dólares el kilo, mientras el marítimo es de unos 1,50 dólares.
“Hay varios factores que entran a jugar, pero entre más larga la distancia menos costoso es el flete. Claro, aún hay varios países a los que no podemos llegar vía marítima, ya sea por el tiempo o porque es menos efectivo, como es el caso de Panamá, España, Uruguay y algunos destinos de EE.UU.”, dijo.
Desde la óptica de Marcos Ossa, director de Asocolflores Antioquia, transportar las flores por aire ha sido el método más usado en el sector, puesto que la logística por contenedores vía mar es más compleja y “para muchos productores llegar a los puertos de la Costa Atlántica sigue siendo más difícil”.
Por esta razón, el dirigente gremial recalcó la importancia que tienen Puerto Antoquia y Pisisi, que se están construyendo en el Urabá. “Esas terminales serán determinantes para las flores”, dijo.
Por ahora, el sector floricultor se prepara para noviembre, uno de los meses que más jalonan las exportaciones por fechas como Acción de Gracias y Navidad.
