La exsecretaria de Salud Andree Uribe Montoya deberá afrontar un proceso disciplinario por cuenta de presuntas irregularidades en el contrato de comodato con el que la Alcaldía de Medellín utilizó la Clínica de la 80 durante la pandemia.
Luego de varios meses de investigaciones, la Personería de Medellín consideró que la exfuncionaria habría incurrido en una falta disciplinaria gravísima al haber firmado un contrato con la EPS Saludcoop, actualmente en proceso de liquidación y reportada en el boletín de responsables fiscales de la Contraloría General de la República.
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A través de un comunicado, el ente de control planteó que dicha organización estaba inmersa en “una causal de inhabilidad”, por lo que el gobierno local no tenía permitido suscribir contratos con ella.
“La presunta conducta vulneró la Ley 734 de 2002 en el Artículo 48 Numeral 30, en la cual se establece que es una falta gravísima intervenir en la tramitación, aprobación, celebración o ejecución de contrato estatal con persona que esté incursa en causal de incompatibilidad o inhabilidad prevista en la Constitución o en la Ley”, detalló la Personería en su pronunciamiento, añadiendo que Saludcoop aparece con 11 reportes de responsabilidad fiscal en la Contraloría.
Las pesquisas de la Personería comenzaron desde mayo de 2020, cuando la Alcaldía anunció que el Hospital General de Medellín (HGM) se encargaría de operar ese lugar para mitigar la presión que se auguraba en la red hospitalaria por cuenta de la pandemia por el coronavirus.
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El lugar, abandonado desde tiempo atrás, aunque primero se presentó una oportunidad para expandir las unidades de cuidados intensivos en la ciudad, luego pasó a ser un centro de atención a pacientes de baja complejidad.
Según informó entonces la Alcaldía, el centro tendría 95 camas de hospitalización ubicadas en los pisos 5 y 6, para los que se invirtió en tareas de adecuación de redes eléctricas, de gases medicinales, entre otros.
En octubre de 2022, la Personería también anunció la apertura de una investigación disciplinaria en contra del gerente del HGM, Mario Fernando Córdoba, y otros funcionarios por presuntas inconsistencias en el convenio que regula la operación del lugar y en los contratos del personal de salud que allí estuvo.
“En dicho proceso fueron encontrados dos hallazgos. El primero, relacionado con la presunta modificación del objeto contractual y el segundo, con la supuesta contratación de personal no contemplado. Ambas acciones adelantadas por parte del Supervisor y la Directora de Compra sin la figura del Otrosí y sin la autorización del ordenador del gasto”, expresó entonces el ente.
Cabe recordar que a comienzos de 2022, pese a que la Alcaldía había expresado su intención de comprar dicho lugar, la clínica fue adquirida por la Clínica Vida, para crear un centro de atención para pacientes oncológicos.
Sobre el caso de Uribe Montoya, la Personería finalmente añadió que tras la formulación del pliego de cargos continuará con un proceso de juzgamiento, en el que se determinará si la exfuncionaria es sancionada.
