El portal periodístico El Armadillo reveló como un hombre que se hacía pasar por heredero de algún reino árabe se logró codear por año y medio con la crema y nata de la sociedad antioqueña, incluyendo oficiales de la Policía y del Ejército e incluso del exalcalde Daniel Quintero.
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Entre diciembre de 2021 y junio de 2023, Fereidoun Khalilian se movió en Medellín entre empresarios, políticos y militares. Así quedó registrado en sus redes sociales en las que ostentaba grandes lujos y banquetes de ensueño.
En internet, Khalilian se presenta como miembro de una familia real árabe, empresario de criptomonedas, agente de espectáculos, representante de celebridades, ejecutivo de empresas tecnológicas, dueño de un sello discográfico, heredero de una fortuna, víctima de la Revolución Islámica y refugiado de guerra. Sin emabrgo, Paradis Khalilian —su prima hermana— le dijo a El Armadillo que su primo “es un narcisista que nada tiene que ver con la realeza”. También dijo que es “muy rico” y que construyó su fortuna gracias a su trayectoria de fraudes y estafas.
La primera publicación en Instagram de Fereidoun Khalilian en Medellín fue el 28 de diciembre de 2021, según constató El Armadillo. En ellas lo acompaña su novia la modelo, presentadora de televisión y reina de belleza Andrea Aguilera Arroyave.
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En cuatro fotos que publicó el 26 de junio de 2022 Khalilian aparece con el exalcalde Daniel Quintero en el restaurante Okus, en El Poblado. “Es uno de los hombres más increíbles que he conocido desde que estoy en Columbia [sic]”, escribió sobre el segundo encuentro con el exalcalde.
El medio indicó que en la cena de Okus, Quintero y Khalilian hablaron de negocios. “El alcalde le dijo que quería convertir el aeropuerto en un ‘Central Park’ y Fred le respondió que quería invertir ahí, que podía construir un hotel. Quedaron de volver a conversar, pero después Quintero le dijo que hablara con su asistente y nunca le volvió a responder”, dijo una fuente que estuvo en esa conversación.
Según Quintero, esa fue la última vez que vio a Khalilian, pues tras indagar se dio cuenta de que el tipo no era ningún heredero árabe. “Alerté a varias personas de que era un falso príncipe y eso hizo que me enviara algunos mensajes y audios enojado. Supe hace poco de su captura en Estados Unidos”, le dijo a El Armadillo.
Otra de las pesquisas del medio digital demostró que inexplicablemente Khalilian contó por lo menos entre diciembre de 2022 y febrero de 2023 con escolta policial pagada por los contribuyentes.
Preguntado por este asunto, el comandante de la Policía Metropolitana dijo que esa institución no asignó recursos ni personal para esa escolta. Incluso citó una norma para explicar qué Khalilian no cumplía con las condiciones para recibir protección especial de la Policía.
Luego el comandante cambió la versión ante la evidencia. Dijo que se trató de “un acompañamiento preventivo, extraordinario y temporal de cuatro uniformados y dos motocicletas” y que el propósito fue “evitar afectaciones en contra de la integridad del señor Fereidoun Khalilian”. Sobre las razones para que el príncipe accediera a ese privilegio, el general Novoa dijo que fue “en contraprestación a la generosidad de Fereidoun” con una fiesta de quinceañeras en diciembre de 2022 en el Dann Carlton.
“El señor Khalilian contribuyó para poder llevar a cabo la actividad con el apoyo de cierta parte de los suministros logísticos necesarios (vestidos, comida, etc.)”, dijo Novoa.
El falso príncipe y su “princesa” también se reunieron con Juan Carlos Fajardo, comandante de la IV Brigada del Ejército. Entre febrero y junio de 2023, Fajardo se reunió por lo menos cuatro veces con Khalilian. Además, el hijo del general, de 18 años, era un asiduo acompañante de Khalilian en sus correrías por Medellín y la Cuarta Brigada.
“El Armadillo confirmó que Khalilian propició los primeros encuentros con el general Fajardo para pedirle interceder en los trámites para comprar las armas y obtener los permisos de porte para sus guardaespaldas (...) Después los escoltas de Khalilian recibieron tres pistolas Córdova desarrolladas por Indumil”.
El rastro en redes de Khalilian se desvaneció en junio de 2023. Su nombre reapareció el 22 de junio cuando se reseñó su arresto en Las Vegas tras ser acusado de ordenar el asesinato de un cineasta, antiguo empleado suyo, que investigaba su vida para un documental.
