Varios disparos se escucharon en el parque principal del barrio Cristo Rey, de Medellín, que acabaron con la vida de alias El Rolo, un reconocido habitante de calle del sector, los vecinos aún se preguntan por qué lo mataron.
Este homicidio hizo parte de una racha ocurrida el miércoles 8 de noviembre que dejó en evidencia el incremento de asesinatos contra esta población. Muchos de estos casos han ocurrido por riñas y actos de intolerancia, aunque algunos se aventuran a hacer mención de que hay acciones coordinadas en los barrios donde han sucedido 20 de los 42 asesinatos de los habitantes de calle.
El secretario de Seguridad de Medellín, general (r) José Gerardo Acevedo, manifestó que “lamentablemente estamos alrededor de los 40 homicidios de habitantes de calle. Producto la mayoría de la intolerancia”.
Los análisis de algunos expertos dan cuenta de que los crímenes en contra de estas personas se dividen de acuerdo a las zonas donde ocurren. Por un lado están los del centro de Medellín, que son 22 los que se han registrado este año.
De acuerdo con las autoridades, en su gran mayoría estuvieron vinculados con riñas entre esta población que se ha tomado algunos sectores, principalmente el llamado Bronx, en la carrera 54 (Cúcuta) entre las calles 59 (Zea) y 60 (La Paz).
Cuando se llega a los barrios las primeras versiones hablarían de que estas personas son asesinadas por algunas estructuras delincuenciales con el objetivo de evitar que entren a sus calles.
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“Se está presentando el fenómeno de que los habitantes de calle permanecen todo el día en el centro y luego se van dirigiendo a los barrios, situación que puede generar molestias entre los habitantes y algunos, como un acto de intolerancia, pueden reaccionar atacándolos. Por eso se presentan muchos casos de ataques con objetos contundentes”, manifestó Luis Fernando Quijano, director de la Corporación para la Paz y el Desarrollo (Corpades).
Esta versión fue desmentida por el secretario Acevedo, quien aseguró que no hay un exterminio de esta población y por el contrario se debe a riñas y venganzas por la distribución y consumo de estupefacientes.
A propósito del caso de Cristo Rey, en la comuna 15 (Guayabal), esta es la zona de la ciudad donde se han registrado más asesinatos de esta población, con siete casos, seguido por Belén, con cinco. Cabe recordar que entre finales de enero y comienzos de marzo se presentaron tres asesinatos de habitantes de calle en la quebrada La Guayabala, al parecer, en medio de una disputa entre esta comunidad por el control del territorio, hecho que incrementó las cifras en la comuna 15.
Para el caso de Belén, los altercados en las márgenes de las quebradas de la zona dejaron tres de los cinco asesinatos, mientras que los otros dos hechos se produjeron en la vías aledañas con armas blancas. Los demás asesinatos de los habitantes de calle se reportaron en la comuna de Castilla (3), dos en Manrique y de a un caso en las comunas de Santa Cruz, Robledo y Villa Hermosa.
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Desde la Secretaría de Seguridad manifestaron que han trabajado arduamente para esclarecer cada uno de los crímenes de estos habitantes de calle y que este año se han resuelto 18 de estos, con capturas incluidas. La estrategia de seguridad se ha fundamentado en complemento con los sistemas de videovigilancia que tiene la ciudad y que se encuentran en las zonas donde se concentran los habitantes de calle.
Para los casos que quedaron impunes se mantienen las recompensas, que ascienden a los $100 millones para quienes otorguen información sobre quienes, por cualquier razón, estén matando a los habitantes de calle.
