En medio de la incertidumbre de algunos trabajadores, el Hospital General de Medellín reconoció que ya salieron 70 personas que formaban parte de su personal, aunque aseguró que esta medida no se trata de un despido masivo, sino de un proceso de restructuración para optimizar los recursos económicos y humanos luego de que las finanzas de la entidad se vieran seriamente golpeadas, a tal punto de adeudarles varias quincenas a los trabajadores.
Así lo reconoció Claudia Helena Arenas, la nueva gerente de la entidad, quien explicó que el personal retirado formaba parte de entidades tercerizadas y no de la planta contratada directamente por el hospital. “No es un despido masivo. La planta vinculada del personal del hospital es alrededor, en este momento, de más de 1.200 personas y de estas personas que están en planta no hemos hecho ningún despido”, explicó.
La decisión que se tomó con este personal, cuya lista se filtró, tendría que ver con que muchos de los procesos que se prestaban a través de las llamadas “agremiaciones”, se delegarían directamente en el personal de planta del hospital, con el fin de ahorrar recursos para solucionar los problemas económicos urgentes que se tienen actualmente.
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“Hay algunas agremiaciones que teníamos un costo exagerado de lo que estábamos viendo y el proceso que hacían ni tan siquiera estaba claro. Entonces, hay procesos que no nos entregaron, que no los tenemos y que obviamente el recurso hay que revisar como lo hacemos con personal del hospital”, señalo la gerente.
Indicó que durante el análisis que se hizo, antes de hacer efectivo el retiro de estas 70 personas se encontró con que habría áreas que tendrían más gente de la que se necesitaba, por lo que se habría decidido salir de quienes no estarían vinculados directamente.
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No obstante, la denuncia daría cuenta de que entre los despedidos habría personas que llevan más de 15 años dentro del hospital, pero ante esto aseguraron que serían personas que ya estaban jubiladas y que para continuar trabajando se les hizo contrato mediante estas empresas externas.
“No es real. Hay mucha gente que hemos ido revisando. Y lo que te digo, las personas que han salido y que podrían llevar tiempo, es gente que ya probablemente estaba jubilada y que continuaba trabajando a través de una agremiación”, aseguró Arenas.
La nueva directora aseguró que se continúa con el análisis de todos los procesos que se están llevando a cabo en el hospital para establecer cuál es el personal que debe seguir y qué áreas o procesos se pueden optimizar, todo con el fin de refinanciar económicamente a la entidad.
