Por medio de las redes sociales se difundió un mensaje desde la semana pasada en el que se recomienda a los conductores no subir a determinados barrios de la comuna 3 (Manrique) por la delicada situación de orden público que se vive allá. Los habitantes de la zona han sentido el impacto de ver cómo se les dificulta conseguir un taxi o un carro de aplicación después de cierta hora.
“Se recomienda a los pilotos nocturnos que no ingresen después de las 21:00 h (9:00 p.m.) a Manrique Oriental, Jardín, Parque Gaitán, Palos Verdes y Santa Inés por problemas de seguridad”, dice el mensaje que se ha expandido viralmente entre todos los conductores.
Pero a diferencia de muchos chats que llegan a los celulares de taxistas y conductores de aplicación, este sí tendría veracidad y se estaría aplicando entre los gremios de conductores formales e informales con el objetivo de salvaguardar sus vidas.
César Cano, conductor de aplicación y quien tiene varios vehículos a su cargo, explicó que “mis muchachos ya no están subiendo por esas zonas porque consideran que es muy peligroso. De hecho, ya me dijeron que no iban a un taller que queda cerquita de Palos Verdes por el temor que hay por la seguridad”.
Taxistas, que prefirieron reservar su identidad, también manifestaron que cuando cae la noche prefieren llegar hasta la principal que va hacia Santo Domingo Savio y no continuar ingresando hacia Manrique, todo para evitar perjuicios con la seguridad.
Sin embargo, John Fredy Escudero, líder gremial de los taxistas de Medellín, manifestó que “nosotros seguimos llegando a todos los barrios de la ciudad, mediante la campaña ‘Yo voy’, porque nuestra idea es prestar el mejor servicio a los usuarios. Aunque es verdad que nosotros supimos de ese mensaje desde la balacera del pasado viernes”.
Se estima que por esta situación cerca de 60.000 de los 148.000 habitantes que tiene esta comuna se están viendo afectados por esta situación, principalmente en las noches.
Miedo latente en la zona
Los habitantes de las zonas mencionadas, además de los sectores más periféricos de la comuna 3, se han visto perjudicados por la falta del transporte público individual, sobre todo después de que los buses terminan su operación en la zona después de las 10:00 p.m.
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“Eso por acá, en la noche, ya no se ve un alma y a los carros no los dejan subir, diciendo que si entran les pueden hacen algo. Realmente la situación está muy compleja”, manifestó un vendedor informal de uno de los sectores afectados por esta situación.
La situación de orden público en este sector de la ciudad se ha venido complicando en los últimos meses, situación que ha llevado a un incremento exponencial en los homicidios, si se comparan los números con los de los años más recientes.
Desde el primero de junio se han registrado 10 asesinatos en esta comuna, cuando terminados los primeros cinco meses del año se registraban nueve, según el Sistema de Información para la Seguridad y la Convivencia (Sisc).
Las hipótesis que se generan en torno a esta crisis de seguridad pasan por la confrontación entre las estructuras delincuenciales por el control de las plazas de vicio que serían controladas en su momento por el excabecilla de la banda La Terraza, Carlos Marín Ospina, alias Tombolín, y que varias organizaciones se estarían disputando.
Pero el sábado surgió una nueva versión, entregada por el alto comisionado para la Paz, Danilo Rueda, quien aseveró que estos hechos estarían relacionados con estructuras que estarían interesadas en sabotear el proceso de la paz urbana que se lleva en el Valle de Aburrá.
“Pese a los mencionados intentos de saboteo, las delegaciones continúan avanzando en una metodología para el proceso y en propuestas de paz con una agenda de transformaciones territoriales”, expresó Rueda en un comunicado de prensa.
Para tratar de controlar la compleja situación de orden público que se vive en esta comuna, la Policía Metropolitana, con apoyo de la Secretaría de Seguridad de Medellín, desplegó a más de 100 personas para realizar labores operativas y preventivas.
Adicionalmente, expresó el alcalde de Medellín, Daniel Quintero, se darán recompensas de hasta $100 millones por aquellos que están generando esta crisis de seguridad en el nororiente de Medellín.
También se ubicarán cinco robocops en sitios estratégicos para las labores de vigilancia y se hará monitoreo conjunto con las cámaras de seguridad y el helicóptero de la Policía Metropolitana.
“Vamos a seguir en estas actividades el tiempo que se requiera. La presencia va a ser permanente mientras que la situación no llegue a su normalidad”, dijo el secretario de Seguridad de Medellín, general (r) José Gerardo Acevedo.
Pero mientras se ven los resultados de todas estas estrategias, los usuarios de los taxis y las aplicaciones son quienes pagan los platos rotos, porque mientras esta situación no se solucione, o deben llegar antes de las 9:00 p.m. a sus casas o quedarse hasta el otro día donde los reciban por la falta de transporte.