La visita de Michel Bachelet, Alta Comisionada de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas (ONU), a Venezuela deja en evidencia lo que todo el mundo ha visto: el régimen viola los Derechos Humanos.
Así lo respalda el informe presentado ayer, en el que deja claro que “existen motivos razonables para creer que se han cometido graves violaciones de los derechos económicos y sociales, incluidos los derechos a la alimentación y la salud, en Venezuela” y que Nicolás Maduro aún se niega a reconocer la magnitud.
El informe, citando cifras de la ONG Foro Penal Venezolano, destaca que por lo menos 5.045 personas fueron detenidas por motivos políticos entre enero de 2014 y mayo pasado.
Ejecuciones
Hay otras cifras que resultan preocupantes y tienen que ver con presuntas ejecuciones extrajudiciales, que son llamadas por el régimen como “resistencia a la autoridad”.
Según la ONU, Venezuela notificó que fueron 1.569, mientras que el Observatorio Venezolano de la Violencia señala que al menos fueron 2.124. “La información analizada por ONU indica que muchas de esas muertes pueden constituir ejecuciones”.
Aunque este informe ha sido bien visto por los opositores al régimen, el director de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco, reaccionó en su cuenta de Twitter. Manifestó que refleja “la catástrofe”, aunque señaló que se requiere de una reacción inmediata del Consejo de DD.HH. de la ONU, “que Bachelet omite”.
Además, el informe de Bachelet reseña que mientras se agudizaba la crisis económica, “las autoridades empezaron a utilizar los programas sociales de forma discriminatoria y como instrumento de control social”.
Otra preocupación que evidencia la ONU es que las recientes sanciones “están agravando la crisis económica, lo que en último término aumentará el impacto negativo” en la población.
A través de un comunicado, el régimen señaló que es una versión “distorsionada” de la información que entregó y que “se privilegian las fuentes carentes de objetividad y se excluye casi en su totalidad la información oficial”.
¿De qué servirá?
Aunque la publicación de la ONU deja en evidencia lo que está pasando, el investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario, Ronal Rodríguez, señala que más allá de sanciones o acciones concretas, lo único que hará es visibilizar lo que está pasando con este país, ya que “la ONU no tiene los dientes suficientes para tomar medidas concretas. Es una cuestión de opinión pública y de visibilizar un régimen dictatorial”, expresa el analista.
Teniendo en cuenta este panorama, aunque la ONU pide, entre otras, dejar las torturas y la persecución a los opositores, también en sus recomendaciones, le dice al régimen que adopte las medidas para garantizar la disponibilidad de alimentos, agua, medicamento y servicios de atención a la salud, sectores en los que también se están vulnerando los derechos de los venezolanos.
Bachelet llamó la atención de “todas las personas con poder e influencia” para que asuman los compromisos necesarios para solucionar la crisis.