El expresidente uruguayo José “Pepe” Mujica, conocido por su carisma y estilo de vida humilde, tuvo su primera presentación pública luego de culminar su tratamiento de radioterapia al haber sido diagnosticado con un cáncer de esófago a sus 88 años este 2024, antes de cumplir 89 años en mayo.
En la noche de este miércoles 26 de junio, Mujica apareció celebrando con una energía contagiosa en el cierre de campaña para las elecciones internas del Frente Amplio, realizado en el Palacio Peñarol de Montevideo. El hombre apareció bailando junto a su esposa, Lucía Topolansky, al ritmo del famoso cantante, y amigo suyo, Rubén Rada con los versos: Cuando yo me muera no quiero canto mi pena / Prefiero que se me velen / Bailando una rica plena / y si no me muero tampoco tengo problema / porque tengo todo el tiempo de bailar hasta que muera.
Videos del evento, que rápidamente se viralizaron en redes sociales y fueron recogidos por diversos medios de comunicación, mostraron a Mujica con su chaleco de cuello en V y una camisa, abrigado con una chaqueta; moviendo sus caderas y aplaudiendo al son de la música, mientras las banderas uruguayas y las del Frente Amplio ondeaban alrededor.
En un momento destacado, Mujica saludó afectuosamente al cantante Rubén Rada, creando un instante de camaradería y celebración.
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A sus 89 años, el exmandatario no solo mostró su vitalidad en la pista de baile, sino también su espíritu inquebrantable.
En otro video, se le vio bailar junto al exsenador Alberto Couriel al ritmo de “Cha cha muchacha”, mientras los partidarios presentes los animaban con gritos de “¡Mueva, mueva!”.
Raquel Panone, su médica, declaró a la cadena CNN que el expresidente está en buen estado y que completar el tratamiento fue crucial. Ahora, se espera un periodo de dos meses para realizar los controles necesarios y evaluar el impacto de las sesiones de radioterapia.
Panone también destacó que Mujica debe seguir cuidándose de las infecciones respiratorias debido a una enfermedad inmunológica preexistente, pero señaló que su alimentación ha mejorado significativamente.
Mujica había confirmado su diagnóstico en una improvisada conferencia de prensa, diciendo: “En mi vida más de una vez anduvo la Parca rondando el catre, pero me siguió pastoreando. Esta vez me parece que viene con la guadaña en ristre y veremos lo que pasa”.
A pesar del diagnóstico, Mujica dejó claro que seguirá activo: “Mientras pueda, seguiré militando y entretenido con las verduras. Mientras el rollo aguante, voy a seguir”.
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La aparición de Mujica en este evento no solo fue un testimonio de su resiliencia y pasión por la vida, sino también un recordatorio de su compromiso inquebrantable con su país y su gente. Con su baile y su espíritu indomable, Pepe Mujica demuestra que en tiempos difíciles, la alegría y la esperanza pueden prevalecer.
