El expresidente peruano Alberto Fujimori, condenado a 25 años de prisión por crímenes contra la humanidad, recobró la libertad este miércoles bajo el amparo de un indulto concedido por razones humanitarias, pese a la objeción de la justicia interamericana.
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Con mascarilla y conectado por sonda a un tanque de oxígeno, Fujimori salió de la cárcel acompañado por sus hijos Keiko y Kenji en una camioneta gris que se abrió paso lentamente entre decenas de seguidores.
De 85 años, Fujimori padece un cáncer lingual, fibrilación auricular, hipertensión, entre otras dolencias.
“La salud de mi padre es frágil. Lo más importante ahora es cuidarlo y hacer que poco a poco se recupere. Sabemos que su mejor terapia es el amor de su familia”, dijo Keiko a la prensa tras arribar a su vivienda junto al expresidente.
Fujimori volvió a la libertad por orden del Tribunal Constitucional, que el martes le restituyó el indulto que le habían otorgado en 2017 por razones humanitarias.
Además el Tribunal Constitucional alegó que Fujimori ya cumplió “aproximadamente las dos terceras partes de su condena”.
Las mantanzas
Conocido como “El Chino”, Fujimori fue muy popular por su lucha sin cuartel contra la guerrilla maoísta de Sendero Luminoso, cuyos principales líderes fueron apresados.
Sin embargo, en ese camino y bajo sus órdenes un escuadrón clandestino arrasó con vidas inocentes, en por lo menos tres matanzas, en las que la justicia probó que el entonces presidente era el autor intelectual de las mismas.
Eso fue lo que ocurrió el 3 de noviembre de 1991 cuando hombres encapuchados asesinaro a 15 personas que estaban reunidas en una fiesta. Al parecer el comando confundió dicha celebración con una reunión conspirativa contra el gobierno de Fujimori y mató a sangre fría a los civiles, entre ellos un niño.
Más adelante, el 18 de julio de 1992 ocurrió el asalto a la sede de la Universidad Nacional Enrique Guzmán. De nuevo un comando armado interrumpió una clase y secuestró al profesor y a 9 de sus estudiantes. Sus cuerpos sin vida fueron hallados en fosas en la zona de Cieneguilla, en el este de la capital peruana.
Ese mismo comando, el Grupo Colina, perpetró otra matanza el 29 de enero de 1992, de seis líderes comunales, bajo la sospecha de ser miembros de Sendero Luminoso, en un hecho ocurrido en los anexos El Caraqueño y San José en Pativilca, provincia limeña de Barranca.
Durante su mandato de 10 años, (1990-2000) también se le acusó de aplicar un programa de esterilizaciones forzadas en las comunidades campesinas e indígenas como parte de un programa de salud reproductiva y planificación familiar. Según un informe de La Razón de España, las mujeres eran manipuladas para someterse al procedimiento. En caso de negarse eran amenazadas con ser encarceladas o arrebatarles a sus hijos. En otras ocasiones, se les realizaba el procedimiento sin su consentimiento. Se estima que más de 6.500 mujeres fueron víctimas y durante la vigencia del programa, más de 217.000 mujeres fueron esterilizadas.
Los crímenes perpetrados contra la humanidad por Fujimori le valieron apenas una condena efectiva de 25 años, que purgó durante 14 años en el penal Barbadillo, una pequeña cárcel para expresidentes.
Rechazo a la libertad
Las vícitmas del expresidente recharon que hoy el verdugo de sus familias vuelva a la libertad. “Es una burla para los familiares y víctimas. El señor nunca nos pidió perdón y ahora sale como si nada”, dijo a la AFP Gladys Rubina, hermana de una de las víctimas de las matanzas por las que fue condenado el expresidente. “Solo tengo confianza en la justicia de la Corte” interamericana, añadió.
“Un indulto como este es una cachetada al país que nos duele en el alma. En el país, cuando hay sentencia judicial, se cumple hasta el último día, no hay privilegio para nadie”, declaró el cardenal de Perú, Pedro Barreto.
Fujimori aún tiene una deuda pendiente con el fisco por unos 15 millones de dólares derivada de las cuatro condenas por crímenes contra la humanidad y corrupción.
Paréntesis: Las condenas contra Fujimori:
Varios fueron los procesos que enfrentó Alberto Fujimori que terminaron en condenas de prisión, no solo por sus crímenes contra la humanidad sino también asociados a corrupción:
- 2007: Usurpación de funciones (6 años)
- 2009: Matanza de Barrios Altos y La Cantuta (25 años)
- 2009: Peculado y falsedad ideológica (7 años y 6 meses de cárcel)
- 2009: Corrupción y espionaje (6 años)
- 2015: Desvío de fondos (8 años).
