Las autoridades de Quito, capital de Ecuador, están tras la pista de los presuntos pirómanos que habrían causado una serie de incendios forestales esta semana que amenazaron varias zonas de la ciudad y generaron una crisis ambiental a gran escala.
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Si bien, las altas temperaturas y la extensa sequía en el país tenían bajo alerta a las autoridades y ya había provocado varias conflagraciones, también había sospechas de que los incendios del pasado martes, 24 de septiembre, habían sido provocados por la acción humana. Esa hipótesis se confirmó tras la captura de varias personas, entre ellas la de un hombre de origen colombiano.
“Tras el inmediato despliegue investigativo y operativo, se localizó y aprehendió a Jerson C., de nacionalidad colombiana, quien habría causado un incendio forestal en el puente de la Avenida Eloy Alfaro y Las Palmeras”, informó la Policía de Ecuador en una publicación en su cuenta de X.
Las autoridades ecuatorianas han recibido 18 denuncias de personas señalas de provocar los 27 incendios de esta semana, que dejan, hasta el momento, siete personas heridas, entre ellas un bebé de once meses y dos bomberos; siete viviendas destruidas y 140 hectáreas de bosque afectadas.
Debido a la situación, la capital declaró el estado de emergencia con la que el alcalde Pabel Muñoz busca gestionar ante la banca multilateral préstamos por 500.000 dólares para la reconstrucción de bienes afectados y la recuperación de la flora. Muñoz también pidió la colaboración del sector privado para aumentar el monto y llegar al millón de dólares.
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Incendios forestales se han presentado en todo Ecuador en lo que va de 2024, según la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos.
