Tras realizar un operativo, las autoridades de Australia lograron neutralizar y capturar a los integrantes de una banda que se dedicaba al robo de cartas premium de colección de reconocidos videojuegos como Pokémon, Dragon Ball, entre otros, de diferentes tiendas en ese país.
Por medio de un comunicado, la Policía del estado de Victoria, informó que capturaron los cuatro integrantes de la banda que ya habían robado un total de $31.800 dólares (cerca de 30.000 euros) en estos objetos que son de gran valor en el mundo de las ventas.
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De acuerdo con la investigación, se trataba de un grupo de “crimen organizado” que entre sus actividades ilegales, además de hurtar las cartas, también robaban cajeros automáticos de criptomonedas en el noroeste de Melbourne.
Algunos de los asaltos a las tiendas de objetos coleccionables quedaron registradas en video, por lo que sirvió como inicio para el seguimiento a los delincuentes. Según el escrito policial, los sujetos comenzaron a inicios del mes de enero a cometer los robos.
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Tras dar con su captura, las autoridades también pudieron dar con la ubicación de un depósito en el que los sospechosos tenían todos estos artículos de gran valor, siendo unos 131,162,957.66 pesos colombianos, aproximadamente.
Entre los objetos incautados por la policía en el operativo también se encontraron cartas extremadamente raras del conglomerado estadounidense Disney, del cómic japonés Yu-Gi-Oh, de la Asociación Australiana de Fútbol y de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA) de Estados Unidos.
Asimismo, también les decomisaron a estas personas cinco armas de fuego presuntamente robadas, municiones, herramientas eléctricas y otros materiales con los que ejecutaban los robos en las tiendas.
Con los videos obtenidos y las pruebas incautadas, las autoridades pudieron mantener bajo arresto a dos de los cuatro sospechosos, mientras que los otros quedaron libres mientras avanza la investigación en su contra.
Durante las próximas semanas se espera conocer más detalles sobre la investigación y el destino final de los sujetos que quedaron en libertad en el caso que llamó la atención mundial de los coleccionistas y la opinión pública en Australia.
