La muerte de un joven de 20 años a manos de su novia, de 19, estremeció a Argentina en un caso en el que todavía no ha quedado clara la causa del delito, ni el estado de salud de ella ni de si se trataba de una relación de abuso por ambas partes.
Sin embargo, deja la duda entre la opinión pública acerca de si el caso debería ser tratado con los mismos criterios del feminicidio, que en Argentina está reglamentado como agravante del homicidio desde 2012.
Según publicaron medios locales, la joven Nahir Galarza, de Gualeguaychú (municipio de la provincia de Entre Ríos cercano a Uruguay), confesó haber disparado dos veces contra su novio, Fernando Pastorizzo, en la madrugada del 29 de diciembre con la pistola de su padre (un policía) y se fue a dormir.
Horas más tarde se levantó y tomó su teléfono celular, eligió una foto de ella junto al joven y la publicó en una red social con la frase “Te amo siempre”.
La investigación judicial llevó a sospechar del padre de Nahir, ya que se identificó el calibre de las balas con las que murió el joven como las de su arma reglamentaria.
En un momento en el que el cerco de investigación se estrechaba sobre su padre, Nahir reconoció que había sido ella y pidió que le quitaran la responsabilidad a su padre y a su familia.
Desde ese momento Argentina entró en un torbellino de reacciones, que fueron desde marchas para pedir justicia por la muerte del joven hasta cuestionar la salud mental de Nahir cuando se vio la frialdad con la que había actuado.
En ese sentido, la joven, estudiante de Derecho, fue en primer lugar internada en un hospital psiquiátrico para que se comprobara su estado mental.
Cuando se realizaron las pruebas pertinentes, fue trasladada en una celda de la Comisaría del Menor y la Mujer por una orden de prisión preventiva, informaron los medios locales.
Los padres de la joven afirmaron que ella había vuelto a casa alguna vez con heridas que le habría ocasionado Pastorizzo, aunque desde el entorno del chico también denunciaron que Nahir lo había agredido.
La madre de Nahir, Yamina Kroh, fue una de las últimas en declarar ante la prensa y transmitió el dolor por el que está pasando la familia al descubrir semejante actuación.
¿Qué condena pagaría?
Si se comprueba que al momento del asesinato los jóvenes sostenían una relación, la pena a la que se enfrentaría Nohir es la cadena perpetua, ya que la relación sentimental es un agravante en Argentina delito conocido como “homicidio agravado por el vínculo”; sin embargo, aunque es perpetua la investigación no miraría el estado de indefensión o de poder menor que si fuera una feminicidio, explicaron varias fuentes de ese país a EL COLOMBIANO.
Si la chica Galarza no fuera la novia de Pastorizzo la pena que debería afrontar estaría entre los 8 y los 25 años.
Al respecto, Agustín Laje, politólogo argentino tuiteó: