Un trágico accidente aéreo en Nepal sacudió al país. El vuelo de Saurya Airlines, que despegaba de Katmandú hacia la ciudad de Pokhara, sufrió un accidente alrededor de las 11:00 de la mañana, hora local. De acuerdo con el comunicado emitido por la Autoridad de Aviación Civil, todos los pasajeros a bordo eran empleados de la compañía, con la excepción de un ciudadano yemení.
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Las imágenes proporcionadas por la policía nepalí capturaron el momento en que el avión en llamas se encontraba en la pista del aeropuerto, rodeado por una densa humareda. Según Gyanendra Bhul, funcionario de información del aeropuerto internacional de Tribhuvan, el avión estaba destinado a realizar tareas de mantenimiento técnico cuando ocurrió el accidente.
Afortunadamente, las labores de rescate se iniciaron de inmediato y la situación fue controlada rápidamente, como confirmó la autoridad de aviación. Sin embargo, el incidente resalta los peligros persistentes del transporte aéreo en Nepal, un país conocido por sus desafiantes condiciones de vuelo debido a su terreno montañoso.
Nepal, hogar de ocho de las 14 montañas más altas del mundo, incluyendo el Everest, enfrenta numerosos desafíos relacionados con la aviación. Las cambiantes condiciones meteorológicas y las pistas de aterrizaje ubicadas en zonas montañosas de difícil acceso son factores que contribuyen a un historial de accidentes aéreos. Los aviones con menos de 19 plazas, como el involucrado en este accidente, son especialmente propensos a estos siniestros, según un informe de seguridad de 2019 de la Autoridad de Aviación Civil.
A pesar de las mejoras en las normas de seguridad implementadas en los últimos años, Nepal continúa enfrentando desafíos significativos. La falta de inversión en aeronaves modernas y el mantenimiento de aviones anticuados agravan los riesgos asociados con el vuelo en el país.
Este accidente se suma a una serie de tragedias aéreas recientes en Nepal. El año pasado, el país vivió el peor accidente aéreo en más de 30 años, con la caída de un vuelo de Yeti Airlines cerca de Pokhara que resultó en la muerte de al menos 68 personas.
En mayo de 2022, un vuelo de Tara Air que partía de Pokhara se estrelló contra una montaña, causando la muerte de 22 personas. Además, en 2018, un vuelo de US-Bangla Airlines se estrelló al aterrizar en Katmandú, resultando en la muerte de 51 personas.
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La historia de accidentes aéreos en Nepal subraya la necesidad urgente de continuar mejorando la seguridad y modernizando la flota aérea para minimizar estos riesgos. La tragedia de Saurya Airlines es un recordatorio doloroso de los desafíos persistentes en la aviación en esta región.
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