A Xabi Alonso no le queda grande el apelativo de “maestro”. Como jugador se supo ganar el respeto y admiración de compañeros y rivales gracias a su técnica con el balón y a su lectura de juego rápida y eficaz como mediocampista. Desde esa posición era ya reconocido como todo un estratega.
El hombre, de 1,83 metros de estatura y barba pelirroja, tuvo una carrera gloriosa en sus 18 años como futbolista, pues no solo tocó la gloria europea a nivel de clubes, sino también mundial con su selección de España (ver antecedentes).
Se retiró como jugador en la campaña 2016-17 con el Bayern de Múnich, y ahora, en su segunda temporada como director técnico, sacó campeón al Bayer Leverkusen, elenco alemán en el que ya se especula le podrían hacer un monumento, puesto que ningún otro orientador, en 120 años, había logrado la anhelada consagración con dicho club. Como entrenador, Xabi también logra que sus dirigidos pongan en práctica sus conocimientos.
Xavi fue entrenado por algunos de los mejores orientadores del planeta, y ahora este vasco de San Sebastián, a sus 42 años de edad, puso el broche de oro en su primera gran aventura en los banquillos.
Acabó con una hegemonía
El 20 de mayo de 2017, Xabi Alonso jugó por última vez, a los 35 años. Fue durante la 34ª jornada de Bundesliga con los colores del Bayern Múnich y celebrando un nuevo título de campeón de Alemania en el Allianz Arena, delante de 75.000 espectadores.
¿Se imaginaba el vasco que siete años más tarde sería él quien pondría fin a una hegemonía de once años de campeonatos nacionales del conjunto bávaro (2013-2023)?
Algo es seguro: cuando llegó al Bayern en 2014, deseaba aprovechar sus últimos años en activo para estar en contacto con Pep Guardiola y pensar en su futuro como entrenador. “He intentado ser curioso sobre el trabajo de entrenador, no solamente jugar. He buscado ser cercano a ellos. Me preguntaba ya dónde estaría años más tarde”, confesó Alonso en diciembre en una entrevista concedida a varios medios.
Su papá como inspiración
Natural de Tolosa, a pocos kilómetros de San Sebastián, Xavi tuvo una carrera como futbolista siempre en contacto con grandes entrenadores.
Antes de llegar a Baviera, contó en su última temporada en el Real Madrid con la dirección de Carlo Ancelotti, con quien se reencontraría en Múnich en su última campaña.
Pero su primera fuente de inspiración como estratega dice haberla recibido de su padre, Periko, quien jugó para la Selección de España a principios de los años 1980 (20 partidos como internacional). De pequeño, Xabi le miraba preparar los partidos cuando estaba a la cabeza del equipo reserva de la Real Sociedad, a principios de los años 1990.
Fue precisamente en el club de San Sebastián donde Xabi dio sus primeros pasos en el banquillo (2019), también con el segundo equipo, tras haber entrenado a equipos juveniles del Real Madrid.
“Xabi Alonso siempre ha sido un estratega, sobre el campo estaba siempre en el centro. En aquella época tenía esa visión. Sabía también cómo reaccionaban sus compañeros y adversarios”, recordó su excompañero en el Bayern Múnich, Philipp Lahm, quien colgó las botas en el mismo momento.
Una parte de “intuición”
Sin querer quemar etapas demasiado rápido, Alonso estudió entonces las ofertas que le llegaron, y finalmente se decantó por la del Leverkusen, en aquel momento en la parte baja de la tabla de la Bundesliga a principio de la temporada 2022-2023, tirando un poco “de intuición”.
Poniendo en práctica lo aprendido durante la época en Baviera, desde su primera toma de palabra ha hecho el esfuerzo de hablar en alemán, como hizo Guardiola al llegar al Bayern.
Con una calma notable ante la prensa, a veces deja aflorar los nervios en la zona técnica al borde del terreno de juego, para dar instrucciones y dar rienda suelta a la alegría, como en las ocasiones en las que su equipo ha remontado ‘in extremis’ este año.
Seguirá en el Leverkusen
Él mismo ha reconocido que echa de menos estar sobre el terreno de juego. “No debería decirlo, pero sí. Lo extraño cuando preparo los partidos y cuando estoy al borde del terreno”, dice quien se declara “vasco, totalmente vasco, ahora con mucha influencia germánica”.
Partidario de dar libertad a sus jugadores sobre la cancha, considera no ser “un fundamentalista que pida a este que juegue de esta manera o que diga que esta es la única forma de jugar”, inspirándose del maestro Ancelotti en cuanto a la gestión humana.
Siguiendo los pasos que le marca su carácter de técnico, anunció a finales de marzo que seguirá en Leverkusen la próxima temporada.
En vez de reemplazar a Jürgen Klopp en el Liverpool, Alonso tratará de igualar en Bundesliga lo logrado por el alemán en 2011 y 2012, cuando al mando del Dortmund logró dos títulos de campeón de Alemania contra el todopoderoso Bayern Múnich.
Alonso estimó que el título logrado por su elenco “es sano para el fútbol alemán después del dominio del Múnich”.
Él mismo ganó como jugador tres de los títulos del Bayern en su racha de once consecutivos, los de los años 2015, 2016 y 2017.
“Es la primera vez que el Leverkusen gana el título en 120 años de historia. Estoy feliz por formar parte de esto. Es un momento para celebrar. Uno no gana la Bundesliga todos los días”, añadió el timonel vasco, el gran triunfador de la temporada entre los entrenadores europeos.
Llegó al Leverkusen la pasada temporada y consiguió que el equipo pasara del 17º al 6º puesto, clasificándole para la Europa League. Xabi ha sabido transmitir una filosofía de juego atractiva sin descuidar la solidez defensiva. Todo un “maestro” con el que sueñan con más hazañas.
Ya no serán llamados en Alemania ‘Neverkusen’
En Leverkusen aún celebran. ¿Pero por qué este desborde de júbilo tras su título? Fundado en 1904 por la empresa química Bayer, el Leverkusen logró el primer título de campeón de Alemania de su historia para liberarse de ‘Vizekusen’, que traducía como ‘Segundokusen’ o ‘Neverkusen’ (del término never, ‘nunca’ en inglés), otorgados tras cinco subcampeonatos, incluidos los dos títulos que se escaparon dolorosamente en 2000 y 2002.
El Bayer se ilusiona con más conquistas
El Leverkusen puede añadir más gloria a su temporada, ya que sigue en competencia en la Europa League, en la que tiene encarrilado el pase a las semifinales, y en la Copa de Alemania, donde se enfrentará a finales de mayo en la final al Kaiserlautern (2ª división). Este jueves (2:00 p.m.), Leverkusen viajará a Londres para defender ante el West Ham, en la vuelta de los cuartos de final, la ventaja de 2-0 que logró en la ida en Alemania.
Xavi y un palmarés para admirar
Xavi Alonso es un ganador. Como jugador fue campeón con la Selección de España de la Europa (2008 y 2012), así como del mundo (2010) en aquella final en Sudáfrica ganada a Países Bajos. Defendió a su país en 114 encuentros y convirtió 16 goles. Además, Xabi Alonso también ganó la Liga de Campeones con el Liverpool (2005) y el Real Madrid (2014), además de los campeonatos nacionales de España y Alemania. Ahora, en su corta etapa como técnico, le empieza a dar más brillo a su nombre.
