El seleccionador brasileño, Mano Menezes, fue destituido este viernes del cargo, a un año y medio del Mundial de 2014.
La destitución de Menezes fue tomada en una reunión del presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José María Marín, con el vicepresidente del órgano, Marco Polo del Nero, y el director de selecciones, Andrés Sánchez.
Menezes era el blanco de duras críticas por el juego de la selección, a pesar de la racha de buenos resultados cosechada en los últimos meses.
El seleccionador asumió el cargo en agosto de 2010 después del Mundial de Sudáfrica y, en este tiempo, solo ha dirigido a Brasil en amistosos, en la Copa América de 2011 y en los Juegos Olímpicos de Londres, competición en la que perdió la final contra México.
La eliminación de la Copa América de Argentina en cuartos de final ante Paraguay fue el peor resultado cosechado por el seleccionador.
En este tiempo, Brasil no consiguió ganar a ninguna selección de primer nivel, aunque ha cosechado goleadas contra equipos de segunda fila.
El último partido de Menezes a cargo de la Canarinha fue el torneo amistoso Superclásico de las Américas, torneo que juegan Brasil y Argentina con jugadores de las ligas locales, y en el que el pasado miércoles se impuso el equipo de Neymar en los penaltis.
El balance de Menezes en la selección, incluyendo su periplo con la selección olímpica, fue de 21 victorias, seis empates y seis derrotas, entre ellas ante Argentina, Francia y Alemania.
Al hacer balance de los últimos meses, Menezes opinó el pasado 30 de octubre, el día que anunció su última convocatoria de la selección absoluta, que Brasil estaba evolucionando su juego y había hecho un segundo semestre "bastante positivo".
En sus últimos partidos con la absoluta, Brasil empató 1-1 con Colombia, ganó 4-0 a Japón, 6-0 a Irak, 8-0 a China y 1-0 a Sudáfrica.
El ahora exseleccionador utilizó en este tiempo 102 jugadores, según cálculos de medios locales, e hizo debutar a futbolistas como Neymar y Oscar, estrella del Chelsea.
La prensa brasileña baraja como posibles sustitutos a Luiz Felipe Scolari, seleccionador campeón mundial en 2002, actualmente sin equipo; Muricy Ramalho, entrenador del Santos, o Tite, técnico del Corinthians.
