Si para un occidental es muy difícil identificar y diferenciar a una persona japonesa, coreana o china mucho más lo es distinguir una serie o película de alguno de estos países.
Pero eso ha hecho, según la comunicadora audiovisual y multimedial de la Universidad de Antioquia, Nancy Salazar, experta en contenido asiático, que las producciones de estas naciones se hayan popularizado en conjunto, sumado además, a que las plataformas tienen muchas producciones nacidas en oriente para ofrecer al público.
Otra ventaja, que también ha sido apuesta de servicios como Netflix, es que la mayoría de estas series y películas están dobladas al español. Según su página de prensa hoy entregan contenido disponible y representación de cerca de 14 comunidades asiáticas entre las que se destacan producciones de India, Japón, China, Filipinas, Corea, Indonesia y Vietnam.
“Hay personas a quienes les es muy complejo ver subtítulos y por eso el estar doblado hace que sea más masivo”, dice Salazar.
Lo más destacado
La mayor cuota de contenido la han tenido las producciones de India, para Salazar un cine que desde hace muchos años es bien popular por su colorido y su música. A su vez destaca las novelas turcas que tiene su público: “Alguna vez pregunté en un grupo de Facebook porqué gustaban tanto estas novelas y me respondieron que en estas el romance es muy protagonista, lejos del componente sexual que puedan tener las latinas, pero además considero que cuentan con un alto nivel de producción y ni qué hablar de los galanes turcos, que son muy populares entre las fanáticas”.
En cuanto a series y películas coreanas, puntualiza Salazar que los K-dramas (el drama coreano) venían destacándose en los festivales de cine gracias a directores como Bong Joon-ho, Chan-Wook Park y sus trabajos con grandes guiones y producciones impecables que han buscado expandir su cultura y hacerse ver en el mundo, un ejemplo claro fue lo que sucedió con El Juego del Calamar.
“Pero los K-dramas le abrieron la puerta a producciones chinas, por ejemplo, que con las artes marciales se hicieron un espacio en el corazón de los cinéfilos y ahora su series de drama han comenzado a ser populares por las plataformas”.
También destaca los doramas (drama japonés) y en general que los contenidos asiáticos son de muy buena calidad en su producción y solamente estaban a la espera de plataformas que les dieran un espacio para ser vistas en el mundo. Aquí dejamos algunas recomendaciones.
Corea del Sur
Kingdom: esta serie de suspenso y bastante macabra trae un rostro conocido, la actriz Doona Bae (foto) quien se hizo popular gracias a Sense8. Se ve en Netflix y lleva dos temporadas. Está ambientada en la época de la dinastía Joseon y trae el gran misterio que rodea al rey debido a una rara enfermedad. Su heredero busca descubrir qué está sucediendo.
Está bien no estar bien: serie coreana de 2020 que narra el cruce de las vidas de una escritora de libros infantiles antisocial y un abnegado asistente psiquiátrico que abre el camino menos pensado hacia la sanación emocional. Se ve en Netflix.