Con imágenes captadas en los rincones más remotos del planeta, La vida secreta de los animales, la nueva serie documental de Apple TV+, despliega una narrativa que conecta la experiencia humana con el asombroso comportamiento de las criaturas que comparten nuestro mundo. Filmada en más de 100 países, la producción plantea una reflexión profunda sobre la biodiversidad y su preservación.
“Queremos que las historias sean universales y resalten los paralelismos entre la vida animal y la humana”, dijo Matt Brandon, showrunner de la serie, en entrevista con EL COLOMBIANO. Su enfoque pretende conectar emocionalmente con las audiencias, mostrando que los desafíos de los animales no son tan diferentes de los nuestros.
Filmada durante tres años, cada episodio de La vida secreta de los animales inspira y deleita con una exploración de extraordinarios comportamientos animales, muchos de ellos filmados por primera vez.
Matt Brandon (MB), showrunner y productor ejecutivo, y Mark Flowers (MF), productor, hablaron con este medio sobre los desafíos de crear esta serie.
¿Qué países de Latinoamérica visitaron para sus filmaciones?
MB: “Hay algunas especies de esa zona muy interesantes en la serie. Aunque no grabamos en Colombia, incluimos animales de regiones tropicales cercanas.
Por ejemplo, estuvimos en Perú, Brasil y Centroamérica, además de otras regiones alrededor del mundo. Desafortunadamente, no grabamos en Colombia”.
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¿Cuáles fueron los principales desafíos al filmar en entornos tropicales?
MF: “El mayor desafío fue capturar comportamientos animales específicos. En las regiones tropicales, mantener las cámaras funcionando es complicado por las condiciones extremas de humedad y calor.
Por ejemplo, en Costa Rica, el equipo enfrentó problemas con insectos, que nos obligó a buscar soluciones creativas para acercarnos a la acción sin interrupciones”.
MB: “Exactamente. Queremos documentar comportamientos muy específicos que resulten fascinantes tanto para jóvenes como para adultos. Las áreas tropicales son increíblemente biodiversas y están llenas de historias sorprendentes. Un ejemplo fascinante es el pez saltarín en Trinidad, que puede salir del agua, respirar y orientarse para escapar de los depredadores. Estas historias reflejan la belleza y la complejidad de las áreas tropicales, donde la biodiversidad evoluciona constantemente en una carrera armamentista entre depredadores y presas”.
¿Cómo puede la serie ayudar a aumentar la conciencia sobre la biodiversidad?
MB: “Creo que esta serie muestra que los animales enfrentan desafíos similares a los nuestros, como dejar su hogar o adaptarse a los cambios. Son increíblemente relacionables, y eso puede generar empatía y respeto hacia ellos”.
MF: “Así es. Tratamos de caracterizar a los animales como si fueran personajes de una ópera: madres protectoras, jóvenes aventureros, sabios ancianos. Queremos que las personas se maravillen con sus historias y se sientan inspiradas a proteger la naturaleza.
Hemos intentado que sea familiar, sorprendente y emotiva, para que tanto jóvenes como adultos puedan conectarse con la serie y, a su vez, con el entorno que los rodea. Cuando la gente habla de la naturaleza y comparte lo que ha aprendido, estamos dando un gran paso hacia su protección”.
