Desde su debut en la televisión colombiana, hace ya 23 años, los televidentes han visto a Carolina Cruz como presentadora de diferentes formatos
En cada uno de los programas que ha estado la caleña siempre ha transmitido una faceta de elegancia y seriedad y en formatos que pocas veces la dejan ver tal y como es en su vida cotidiana.
Esa faceta es la que actualmente está mostrando en el programa La vuelta al mundo en 80 risas, en el que es la compañera de viaje del comediante Don Jediondo, con el que recorrió algunos lugares turísticos de Malasia y donde se atrevió a probar (sin mucho suerte) sapo.
Carolina, que lidera la fundación Salvador de sueños (en honor a su hijo menor) habló con EL COLOMBIANO sobre cómo cierra este año y lo que se viene en su vida personal y profesional.
¿Qué la convenció de la propuesta de La vuelta al mundo en 80 risas para aceptar ese viaje tan excéntrico?
“Lo que me he cautivó para aceptar la invitación de este superproyecto de La vuelta al mundo en 80 risas fue el programa como tal, siempre lo he visto, me encanta, me parece maravilloso, es enamorador y muy entretenido para esta época del año, ya que la familia y los niños están en casa. Es viajar por lugares llenos de entretenimiento, eso fue lo que más me cautivó”.
¿Qué fue lo más extremó que vivió en el viaje?
“De lo que viví todo me encantó y me fascinó, lo repetiría feliz y dichosa, pero lo más impresionante fue intentar comer sapo, no fui capaz, literalmente no pude con la textura y el olor, en cambio Don Jediondo sí lo hizo, de resto repetiría la experiencia, el destino, la compañía, la pasamos muy bien, aprendimos mucho”.
¿Se abre la puerta para en el futuro hacer otro tipo de proyectos, además de Día a Día?
“Hacer proyectos diferentes en televisión para mí siempre será muy llamativo, en especial si lo hago en mi casa, que es el Canal Caracol, por eso valoro tanto estar en esta empresa, porque siempre tienen en cuenta a sus talentos para diferentes proyectos, te sacan de la zona confort y te dan nuevas oportunidades, por eso mi sueño por fuera de Día a Día, programa que amo, están vinculados con Caracol, no en otra parte.
Todo lo que se venga tiene que ver con la oportunidad de descubrirme y explorar es bienvenido en mi vida”.
¿Cómo cierra este 2023 como profesional, mujer y madre?
“El balance de 2023 es muy positivo, tengo salud que es lo más importante, a mis hijos muy bien, llenos de vida, al igual que a mi familia, mis amigos y la gente que quiero, que me rodean, que son tan importante.
Así que el balance es muy positivo, es de infinita gratitud a Dios por todo lo bonito logrado este año, que crecí como mamá, mujer, sentimental y profesionalmente, y con mi fundación”.
A propósito ¿Cómo va el trabajo con Salvador de sueños?
“Este año trabajamos mucho en Salvador de sueños, nuestra fundación, afortunadamente los resultados son muy positivos en el desarrollo y logros que hemos tenido con los chiquitos de la fundación, no ha sido fácil, fue un año en el que pasamos por muchas dificultades, no somos un país muy acostumbrado a las donaciones, a la filantropía, así que aprendimos mucho, nos dimos cuenta en qué tenemos que mejorar como fundación y en qué tenemos que trabajar y enfocar nuestras energías”.
¿Para este 24 y 31 de diciembre tiene alguno rito ene especial?
“Lo único que le pido a Dios, no solo en esta temporada, sino todos los días del año, es que me llene de salud y de vida al lado de mis hijos, porque el resto llega por añadidura desde que haya salud.
Desde que todo lo que me rodea esté con salud, amor y tranquilidad siento que el resto de las cosas se pueden conseguir, así que en estas fechas lo que haré será agradecer”.