En Colombia Michael Schumacher no solo es recordado por haber sido siete veces campeón de la Fórmula 1, entre 1992 y 2012, sino también por la enconada rivalidad que forjó con el piloto colombiano Juan Pablo Montoya, cuando este hizo parte de la máxima categoría del automovilismo mundial, de 2001 a 2006.
El alemán, que durante su carrera como piloto tuvo múltiples accidentes y todos los sorteó a su favor, irónicamente no pudo salir bien librado de una caída mientras esquiaba, en la que se golpeó la cabeza contra el borde de una roca. Han pasado 10 años desde ese desafortunado accidente en el que Schumacher, según versiones periodísticas, aturdido pero consciente cuando llegaron los servicios de emergencia, fue trasladado en helicóptero al hospital de Grenoble (Francia).
Allí, fue sometido a una primera operación por “traumatismo craneoencefálico con coma que requirió una intervención neuroquirúrgica inmediata”. Salió del coma en junio de 2014 antes de ser trasladado a Suiza, primero al hospital de Lausana y luego a su casa.
Inició el misterio
Desde ese momento y por los últimos 10 años, la familia del deportista de 55 años de edad, lo alejó de cualquier filtración de los medios de comunicación sobre su estado de salud y de cómo es su vida actual.
Solo hasta 2021, cuando la compañía de streaming Netflix sacó un documental sobre el piloto, se pudieron conocer algunos detalles de boca de su esposa, hijos y allegados. Incluso de quienes estuvieron presentes al momento del lamentable accidente como Olivier Fourcade, instructor de esquí, quien aseguró que Schumacher fue sorprendido por una piedra y lo desequilibró por completo. Pero según su versión, la cámara GoPro que el piloto llevaba colocada en el casco agravó las lesiones. “Se le enganchó primero al esquí y después le atravesó el casco”.
“Por supuesto que echo de menos a Michael cada día, pero no soy solo yo la que lo echa de menos: los niños, la familia, su padre, todo el mundo que está cerca de él. Todo el mundo echa de menos a Michael, pero Michael está aquí. De manera diferente, pero está aquí y eso nos hace encontrar fuerza”, dijo su esposa Corinna en el documental.
“Estamos juntos. Vivimos juntos en casa, hacemos terapia. Hacemos todo lo posible para hacer que Michael mejore y asegurarnos de que está cómodo y simplemente de hacer que sienta que está con su familia y de continuar con nuestro vínculo. No importa lo que pase, haré todo lo que pueda. Todos lo vamos a hacer”, agregó su compañera de vida.
Su hijo Mick, quien hoy es piloto reserva de la escudería Mercedes, también dio su testimonio en aquel documental: “Respeto mucho a mi papá. Siempre lo he respetado, tiene una gran presencia...Cuando entraba a una habitación todos guardaban silencio, así lo recuerdo”.
Nuevos detalles
Jean Todt, expresidente de la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y jefe de Ferrari en la época de Schumacher, reveló en una entrevista para L’Equipe más detalles sobre la situación del excampeón del mundo: “Michael está aquí, así que no lo extraño. (Pero él) simplemente ya no es el Michael que solía ser. Es diferente y se deja guiar maravillosamente por su esposa e hijos que lo protegen”, aseguró.
Sin embargo, hay testimonios más recientes, como el del piloto Nick Fry, quien acompañó al alemán en Mercedes entre 2010 y 2012. “Nunca nadie ha recibido los cuidados médicos de Schumacher. Tiene al mejor equipo médico del mundo y estoy seguro al cien por ciento que ningún ser humano en la historia ha recibido el tratamiento que está recibiendo él. La familia dispone de los recursos”, dijo en la página web del medio Online Betting Guide“.
A estos detalles también se sumaron las declaraciones de Johnny Herbert, quien estuvo con Schumacher en Benneton, y manifestó que no sería raro que el expiloto alemán se pueda ya sentar al lado de su familia para cenar. “Estoy seguro que antes o después lo oiremos y si el equipo médico ha aprendido algo sobre cómo tratar a las personas con este tipo de lesiones, entonces ésa será la contribución más grande de Michael”, aseguró.
Pero la filtración que ha causado mayor interés fue la que hizo el diario Bild de Alemania, que reveló detalles sobre las terapias que le practican y aseguró que Schumacher fue subido a un Mercedes AMG para estimular su cerebro.
No habrá comunicado
Más allá de estas filtraciones, la familia de Michael Schumacher sigue siendo clara en que, pese a la curiosidad de las personas por conocer detalles de su estado de salud, no hará ningún comunicado al respecto. Así lo aseguró su abogado, Felix Damm, en una extensa entrevista al medio alemán LTO.
“No habrá un informe final sobre la condición médica porque la familia considera que eso no acabaría con las especulaciones. Siempre se trató de proteger la intimidad. Por supuesto, discutimos mucho sobre cómo hacerlo. También consideramos si un informe final sobre el estado de salud de Michael podría ser la forma adecuada de hacerlo. Pero eso no habría sido el final y habría tenido que haber informes sobre su estado permanentemente actualizados como se hace con el estado del clima”.
Así que a 10 años del accidente que cambió, no solo su vida sino la del deporte, el misterio seguirá creciendo. Lo claro es que su leyenda permanece gracias a sus siete títulos, dos en 1994 y 1995 con Benetton y los cinco con Ferrari de 2000 a 2004. En 18 temporadas corrió 306 Grandes Premios y ganó 91.
El pasado jueves la escudería Ferrari confirmó la contratación de Lewis Hamilton, el único piloto que comparte la misma cantidad de títulos mundiales que Schumacher. El británico estará ocupando el habitáculo en el que el alemán sorprendió al mundo cuando el que dominaba la Fórmula 1 era el brasileño, Ayrton Senna, quien murió en un accidente en la curva Tamburello del circuito de Imola el 1° de mayo de 1994, dándole paso a su heredero, Michael Schumacher. Se puede decir que, en otras circunstancias, ambos comparten un destino trágico. Sin embargo, tras las últimas filtraciones, el gran campeón alemán parece estar dando “señales de vida”.
