El arquero Sergio Romero, surgido de Racing de Argentina, de larga trayectoria en Europa y quien llegó a Boca en 2022, se convirtió en un ícono del fútbol argentino con sus atajadas en las definiciones por penales del Mundial 2014 de Brasil y en la actual Copa Libertadores.
En la edición 2023 de la Copa Libertadores, el arquero ya le dio a Boca la clasificación en los dos anteriores partidos, atajando penales ante Nacional, en octavos de final, y ante Racing, en cuartos. Lo volvió a hacer, esta vez en la semifinal ante Palmeiras.
En estas instancias ajusta seis atajadas que se unen a la que le hizo a Juan Pablo Zuluaga del Pereira, en la fase de Grupos. Precisamente el cuadro Matecaña que orienta Alejandro Restrepo es el único equipo que le ha podido ganar a Boca en la presente edición de la Copa Libertadores.
En la instancia de octavos de final, Romero atajó dos penales a los jugadores del Nacional de Uruguay (Juan Ignacio Ramírez y el colombiano Daniel Bocanegra), en cuartos volvió a atajar dos penales en la serie ante Racing (Gonzalo Piovi y Leonardo Sigali) y frente a Palmeiras en la semifinal evitó los de Raphael Veiga y Gustavo Gómez.
En redes sociales se han compartido diferentes estadísticas que muestran a arqueros con logros similares a lo hecho por Romero. Aunque la hazaña de atajar seis penales la tenía Ever Almeida con Olimpia, quien en 1989 atajó tres ante Boca, uno frente a Inter y dos contra Atlético Nacional.
Desde su llegada a Boca le han cobrado 23 penales, de los cuales ha atajado 12.